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El partido que fundara el expresidente López Obrador no está pasando por un buen momento, por un lado el escándalo de Pedro Haces, un millonario líder sindical al estilo de Fidel Velázquez que pretendía que los patrones descontaran al trabajador sus adeudos bancarios y que tuvo que ser parado desde la presidencia antes de que el proyecto se presentara en la cámara; un político-empresario que ha llegado a un puesto clave gracias a Ricardo Monreal que, no solo le dio un escaño a él, sino también a su hijo.
La primera vez que vi su nombre fue cuando de la noche a la mañana, las pintas de “gracias presidente” “hasta siempre presidente” que cubrían toda la carretera Picacho Ajusco desaparecieron para ser reemplazadas por otras que decían con grandes letras amarillas “Pedro Haces te desea feliz 2025” ¿quién es ese?, me pregunté, ahora lo sé. Y como si fuera profético, desde el propio partido se pretenden borrar los postulados con los que López Obrador fundó Morena y ganó con ventaja abrumadora en el 2018.
Evidencias hay muchas, citaré solo algunas: la denuncia hecha por la regidora Alejandra Salazar, sobre el mal uso de programas sociales adjudicados como personales por gente de Américo Villareal Santiago.
Una nota de La Jornada de ayer hace la crónica de los nuevos afiliados al partido, “en 15 días (dice la cabeza de nota) Morena sumó a sus filas a un millón de personas: López Beltrán”
Una nota de Sin Embargo da cuenta de que el partido contará con la mayor cantidad de recursos de la historia, pero, contrario a lo sucedido en 2020 en donde por petición del entonces presidente, el partido devolvió al INE los excedentes, esta vez no será así. ¿Y la austeridad republicana?
¿Y cómo dejar del lado a Rocha Moya en Sinaloa, a Salomón Jara en Oaxaca o al mismo Cuauhtémoc Blanco?
La pregunta ya la hice en una columna anterior, pero volveré a repetirla: ¿Para qué necesita más afiliados Morena si no toma en cuenta a las bases?, ¿por qué permite el partido las camarillas de impresentables que solo detienen los procesos en favor del pueblo, como la lucha por las 40 horas?
Morena se duerme en los laureles de un territorio que conquistaron unos cuantos pero que beneficia a grupúsculos que trafican con el poder en el partido y las cámaras.
Un pueblo politizado, jamás volverá a ser engañado y hoy por hoy, nos están fallando.
Ana María Vázquez
Escritora/Dramaturga
@Anamariavazquez
