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MARIO LÓPEZ
Edomex. – Zinacantepec enfrenta una ola de violencia e inseguridad que ha puesto en jaque a la población, particularmente en la comunidad de Santa María del Monte, donde los habitantes denuncian extorsiones, ataques a transportistas y amenazas directas a comerciantes.
Mientras el alcalde Manuel Vilchis Viveros insiste en que su gobierno trabaja para garantizar la paz, los hechos recientes muestran lo contrario.
Taxistas de la zona han difundido imágenes de unidades quemadas tras ataques de grupos criminales que, según denuncias, exigen el pago de “derecho de piso”. Además, operadores han sido secuestrados y golpeados, lo que ha sembrado el terror en el gremio del transporte público.
La violencia también ha alcanzado a los comerciantes: se presume que el líder de un grupo local fue privado de la libertad por negarse a pagar cuotas impuestas por la delincuencia.
A través de redes sociales y mensajes en WhatsApp, habitantes alertaron sobre un supuesto “toque de queda” impuesto por grupos criminales. Seguridad Pública, calificó la información como falsa.
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