Visitas
La Auditoría Superior de la Ciudad de México detectó irregularidades en al menos 3 proyectos de infraestructura pública que sumaban 56.5 millones de pesos.
Omar Montalvo
Ciudad de México.- Aunque el PRI en la Ciudad de México está al borde de su extinción, viejos militantes del tricolor buscan regresar al poder político impulsados por la alianza “Va por la CDMX”, en la que también participan el PAN y PRD.
Un ejemplo es Jorge Alvarado, quien gobernó la Delegación Milpa Alta, de 2015 a 2018, y es aspirante a encabezar la ahora alcaldía. Ello pese a que la Auditoría Superior de la Ciudad de México (ASCM) comprobó prácticas fraudulentas con el uso de recursos públicos en su gestión, las cuales podría repetir.
Casi al final de su gobierno, Alvarado Galicia fue acusado de meter en puestos clave a 20 familiares y amigos, lo que le permitió cometer fraude en diversos rubros.
Según la investigación ASCM/183/16 sobre los gastos de 2016, hubo desconocimiento para hacer contrataciones públicas y falta de verificación de los montos para las obras públicas.
Los proyectos auditados fueron el reencarpetamiento de vialidades de San Pedro Atocpan a San Pablo Oztotepec, por 19 millones 658 mil pesos, y de San Antonio Tecómitl a San Pedro Atocpan, por 19 millones 529 mil pesos, así como su supervisión, por 297 mil pesos.
También la construcción de la Telesecundaria 137 en San Bartolomé Xicomulco, por 16 millones 749 mil pesos, y los trabajos de supervisión de ésta, por 287 mil pesos. Éstos suman un total de 56 millones 520 mil pesos que fueron mal ejercidos por el entonces delegado.
Además, durante su gestión, Jorge Alvarado gastó 17 millones de pesos para contratos que otorgó por invitación restringida y licitaciones, y otros 122 millones 643 mil pesos para los acuerdos comerciales por adjudicación directa.
“Esto sin contar con la aprobación del titular del Órgano Político-Administrativo y sin presentar a la Secretaría de Finanzas y a la Contraloría General de la Ciudad de México, el informe de las operaciones autorizadas”, detalla la investigación de la ASCM.
La administración de la entonces Delegación Milpa Alta tampoco puso a disposición de las autoridades un programa anual de obras públicas y, por lo mismo, no estableció fechas de corte en contratos de obra pública.
Mientras que para designar al funcionario residente de obra, el priísta confundió la Ley de Obras Públicas del Distrito Federal con la Ley de Obras Públicas y Servicios Relacionados con las Mismas.
Dato
La investigación ASCM/183/16 sobre los gastos de 2016 arrojó que hubo desconocimiento para hacer contrataciones públicas y falta de verificación de los montos para las obras públicas.
Dato
El militante tricolor metió a 20 familiares y amigos en puestos clave en la demarcación.
TE RECOMENDAMOS:
Aspirantes a alcaldías por la coalición “Va por la CDMX” son puros corruptos
