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Como alcaldesa provocó la violación del uso de suelo y alargó la construcción a una década
OMAR MONTALVO
Ciudad de México. – Ahora Xóchitl Gálvez con el frente de oposición del PRI, PAN y PRD aspira a la presidencia, para construir una alternativa política, pero cuando fue delegada de Miguel Hidalgo (2015-2018), su administración con pagos no comprobados y modificaciones, provocó que la construcción del nuevo edificio de gobierno se alargara hasta 10 años con una inversión de aproximadamente 200 millones de pesos.
La abanderada de Fuerza y Corazón por México (FCM) antes de dejar el cargo en MH, fue investigada por el Órgano Interno de Control (OIC) de la delegación con la auditoría AJ de 2017 sobre las actividades de 2016, hay una observación por “deficiencias en el proyecto arquitectónico ejecutivo para el nuevo edificio delegacional, debido a que no se apegaron a las normas de construcción de la administración pública del Distrito Federal”.
Para dicho proyecto el gobierno de Gálvez Ruiz contrató a la empresa Cano Vera Urbanismo y Arquitectura S.A. de C.V. para realizar modificaciones al proyecto arquitectónico, sin usar de antecedentes los planos, levantamientos fotográficos, estudios de suelo, cálculos estructurales y de ingenierías.
Ante la falta de datos para una sólida modificación de los proyectos, la delegación MH no reportó los cambios del proyecto al gobierno central, por lo que no tuvo la aprobación de la Secretaría de Desarrollo Urbano y Vivienda (Seduvi) “asimismo, los niveles máximos permitidos de acuerdo a la Zonificación para Equipamiento es de 2 niveles y el proyecto contempla 4”, agrega el documento que auditó 68 millones 792 mil 87 pesos de contratos, la mayoría relacionados con obras para el nuevo edificio.
Mientras que otro agregado en la investigación sobre obras entre abril y junio de 2016 fue que hubo un “pago en la rehabilitación del espacio público de la delegación Miguel Hidalgo (almacén de archivo de recursos humanos) por un importe de 568 mil 313 sin estimaciones y soporte que sustenten los trabajos realizados”.
La investigación también señaló deficiencias en los trabajos por 8 millones 748 mil pesos para la rehabilitación de espacios deportivos, pues las obras dejaron sin agua a los vestidores de algunos inmuebles, y el OIC añadió que hubo 2 millones 339 mil pesos pagados para la rehabilitación de edificios públicos, sin que exista un soporte de la obra ejecutada.
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