Síguenos

¿Qué estás buscando?

mayo 01, 2024

Voces

Arreando al elefante | ¿Un líder charro?

69 lecturas

ANA MARÍA VÁZQUEZ

Esta semana hemos visto protestas y bloqueos por parte de miembros del Sindicato de Trabajadores del Poder Judicial de la Federación, convocados por su líder, Jesús Gilberto González Pimentel (dudosamente reelecto). Es su derecho a manifestarse, muchos dicen que van engañados, al pensar erróneamente que sus derechos serán vulnerados, quizá una minoría, pero estoy segura de que son los más los que conocen a quien están apoyando; en concreto a 11 funcionarios y no precisamente a los 55,800 trabajadores que se manifiestan. A González Pimentel se le ha llamado “líder charro”, un líder que se alía con el patrón en lugar de velar por los intereses de sus bases. Este poder y entreguismo vino con la CTM y el Sindicato Ferrocarrilero allá por los años 40 en el que Jesús Díaz de León (el charro) demandó a Luis Gómez Z. y Valentín Campa acusándolos de desfalco y utilizando al PRI y al ejército para quitarlos de en medio.

Otros líderes sindicales que han jugado de la mano del gobierno y a veces presionando contra él y en detrimento de los trabajadores son Carlos Jonguitud Barrios; Elba Esther Gordillo y Fidel Velázquez, destacados por sus millonarias cuentas bancarias y señalamientos de corrupción. En un documento publicado en la página de la Cámara de Diputados hace 2 años, se hace un recuento del retraso en la impartición de justicia para los trabajadores del Poder Judicial de la Federación, menciona que hasta el 2021 “las jornadas laborales exceden de la máxima legal, en la mayoría de los casos sin remuneración”; no todo el personal ha recibido aumento y los que lo hicieron solo fue del 5%; “los actuarios notifican las 24 horas los 365 días sin percibir viáticos o alguna otra retribución. Al final del documento se propone un reajuste salarial. Este documento puede ser consultado, la situación sigue igual, mientras tanto los 11 ministros y el dirigente sindical pelean solo por sus privilegios usando a los agremiados. El sindicato presiona y amenaza, como desde los años 40. Y los fideicomisos, desde el mandato de Zedillo.

Sin duda, otro de los rubros que tendrían que ser revisados a fondo en este camino de transformación, es por supuesto el sindical.

Te puede interesar

Advertisement