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Se manifestaron en el Zócalo, ya que los traen de una dependencia a otra y los obligan a endeudarse
FERNANDO ROSSEL.
Comerciantes afectados por las obras de la Línea 12, aseguran que Martí Batres, jefe de Gobierno de la CDMX, miente y solo ha ayudado al 15 por cierto, por lo tanto, el 85 por ciento de personas que poseen un negocio en la zona de obras indican que ha repercutido de manera negativa en sus ventas, se encuentran abandonas y afirman que los traen como pelota, pues los envían de una dependencia a otra, inclusive les recomiendan pedir préstamos.
“Ya vinimos tres veces con Batres, otras tres veces a Sedeco y otras tres a Fondeso, donde nos ofrecieron un préstamo, ¡no queremos un préstamo!, ¿qué ayuda es esa? Nos quieren endeudar, y nos mandan de allá para acá, nos traen como pelota”, comentó Guadalupe, dueña de una óptica en Avenida Tláhuac, número 11.
En punto de las 9:00 horas, aproximadamente 500 personas se plantaron a las afueras del edificio de Gobernación de la Ciudad de México, con pancartas, lonas y cartulinas, exigían mesa de diálogo con el jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, sin embargo, no tuvieron noticias satisfactorias, por lo tanto, planean cerrar Periférico si las autoridades capitalinas no les entregan el apoyo.
Los manifestantes piden 96 mil pesos para resarcir el daño porque son más de mil comerciantes en 7 km, de la estación Olivos, a Periférico, aseguran que solo a 200 compañeros se les entregó el apoyo económico pero a los demás los han olvidado, además, también tienen miedo por su seguridad, porque sostienen que las obras representan un riesgo.
“Hay polvo, ruido, tráfico, además de que nuestros negocios están escondidos por las interminables obras, también nos preocupa nuestra seguridad, es que no hay seguridad en la zona, apenas en la semana se cayó un tornillo, pero no uno chiquito, fue uno demasiado grande que si a un peatón le cae, lo mata”, comentó Graciela que tiene una tienda de material eléctrico cerca de la estación Olivos.
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