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Juen Hernández
Pues muy caro le saldrá el numerito al alcalde Mauricio Tabe, quien aplicó la estrategia “entrego, doy mi discurso y me voy” para evitar cuestionamientos de los diputados del Congreso de la
Ciudad de México, pues ahora, el Pleno del edificio de Donceles aprobó que el alcalde de la Miguel Hidalgo sea llamado nuevamente a comparecer ante las Comisiones Unidas de Alcaldías
y Límites Territoriales y de Administración Pública Local.
Los legisladores destacaron la gravedad de que Tabe incumpliera sus responsabilidades constitucionales; el acuerdo parlamentario de las Comisiones Unidas; así como la Ley Orgánica y el Reglamento del Congreso local, y, por ello, la necesidad de que el Poder Legislativo actúe en consecuencia.
Y, además, se hace un llamado a la Secretaría de la Contraloría General para que realice una investigación al respecto, pues el actuar del alcalde panista podría incurrir en la falta administrativa prevista por la ley. Y hablando de diputados blanquiazules, el diputado Diego Garrido López, presentó una propuesta interesante en la que plantea modificaciones al Código Penal local, para establecer como agravante, el uso de ponchallantas y cualquier otro objeto similar para ayudarse en la comisión del delito de robo; incrementando la pena de prisión hasta dos a 8 años.
En recientes fechas, en la Ciudad de México se ha notado el incremento de denuncias públicas por el uso de los denominados ponchallantas, que van desde clavos y tornillos, hasta una especie de estrellas hechas con varillas en la vía pública. “Que tienen como la finalidad, el ponchar llantas de un automóvil y generar condiciones de indefensión para ejecutar la comisión de delios como los asaltos”.
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