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Ricardo Sevilla
Le cuento que ayer, durante una serie de entrevistas presenciales que realicé, fuentes que trabajan en la Suprema Corte de Justicia me aseguraron que la Corte está tomada por el PRI y, desde ahí, están lanzando (y
financiando) varios de los embates contra una de las suyas: la ministra Yasmín Esquivel. César Castillejos Rangel, el director general de Comunicación Social, de la SCJN es un priísta que ha dado cualquier cantidad de contratos a los medios de comunicación antilopezobradoristas”, me aseveraron. Lo curioso, por así describir esta anomalía, es que al revisar el monto de recursos presupuestarios para campañas encontramos que, en efecto, de julio a diciembre de 2022, la Corte asignó más de 10 millones de pesos a campañas publicitarias a varios medios de comunicación tozudamente antilopezobradoristas.
“¿Por qué crees que le están pegando sistemáticamente a Yasmín Esquivel en El Universal? ¡Porque es fuego amigo, que ordenaron justo desde aquí, desde la Presidencia de la Corte!”, me contaron. “No es casual que los principales golpeadores de Yasmín Esquivel escriban en el negocio de Ely Ortiz y, de hecho, sean tipos como Sheridan, Salvador García Soto y Loret. ¡Es un nado sincronizado que tiene el respaldo de la Suprema Corte!”, me explicaron, en una entrevista exclusiva.
Lo que me llamó la atención fue que, en cuatro meses, el negocio de Ely Ortiz recibió de la SCJN más de 383 mil pesos por anuncios que no duraron más de un día. En dos meses, la Corte dilapidó casi 400 mil
pesos en banners, videos documentales y anuncios de recesos vacacionales. Cabe destacar que el director general de Comunicación Social de la Corte, César Castillejos Rangel, en efecto, es un priísta vinculado al itamita Enrique Ochoa Reza, y quien, en su momento, lo nombró secretario de Comunicación Institucional del PRI.
Y para quien no lo tiene en el radar, cabe decir que César Castillejos fue, por lo demás, coordinador de Comunicación de la Campaña a Gobernador de Alfredo del Mazo y director general adjunto de Estrategia de la Coordinación de Comunicación Social y Vocería del Gobierno de la República, en el sexenio del priísta Enrique Peña Nieto.
