18 lecturas
Salvador Guerrero Chiprés
La invitación a la alcaldesa de Iztapalapa para que comparta con las y los españoles su experiencia en la articulación de espacios de cuidado y protección para las mujeres implica un reconocimiento internacionalmente significativo a políticas públicas innovadoras.
La Ministra de Igualdad de España, Irene Montero, puso como ejemplo mundial programas desarrollados por Clara Brugada, como las Utopías, los caminos iluminados, las siempre vivas y la casa refugio Ccompaz —donde el Consejo Ciudadano de la CDMX ofrece apoyo emocional y jurídico—, que pueden ser replicados en otros países. Este fin de semana se clausuró en la Utopía Libertad de Iztapalapa la primera Internacional Feminista, en la que participaron más de 300 mujeres de 30 naciones, un proyecto transfronterizo que parte de la noción de que el feminismo es el principal impulso democrático.
Concluyeron habilidades como las de la ministra Montero; la ministra de la Presidencia de Bolivia, María Nela Prada; la diputada chilena Karol Cariola; la prefecta de Pichincha, Ecuador, Paola Pabón, además de funcionarias, activistas y directoras de instituciones. Representantes de las mejores prácticas en México, entre ellas, la Jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum; la Fiscal General de Justicia, Ernestina Godoy; la presidenta del Instituto Nacional de las Mujeres, Nadine Gasman; la senadora y secretaria general de Morena, Citlali Hernández, y la alcaldesa Brugada.
La convergencia de mujeres con presencia en la toma de decisiones, en una ciudad gobernada por la primera mujer con posibilidades reales de llegar a la presidencia, revela los avances en la transformación
social. De ahí la propuesta de la ministra española para que la alcaldesa vaya a España. Desde Iztapalapa se potencializan capacidades institucionales, ciudadanas y de organismos para armar utopías que dejen de ser un ideal de difícil realización.
