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La obesidad es un grave problema de salud pública en México.
Redacción
Grupo Cantón
CIUDAD DE MÉXICO. – Debido a que la obesidad es un grave problema de salud pública en México y que nuestro país ocupa el primer lugar mundial en ese renglón, el Congreso de la Ciudad de México aprobó una propuesta de la diputada Xóchitl Bravo Espinosa, para que el Gobierno capitalino fomente el consumo de la gastronomía prehispánica entre los habitantes de esta urbe.
Ante el Pleno del Congreso capitalino, la legisladora presentó un Punto de Acuerdo para exhortar a la Secretaría de Salud local, así como a la Secretaría de Pueblos y Barrios Originarios y Comunidades Indígenas Residentes (SEPI), a que difundan y fomenten el consumo de las dietas tradicionales de los pueblos originarios, así como sus beneficios para la salud.
La legisladora manifestó que las conductas que favorecen la actual epidemia de obesidad en la población mexicana se originan desde la infancia y están fuertemente arraigadas, por lo que es muy difícil modificarlas sin un conocimiento cabal de la cultura alimentaria.
“Conseguir una mejor salud de los capitalinos y apoyar los estilos originarios de la cocina mexicana es una meta de la Ciudad de México, en la que se puede alinear una visión a favor de los pueblos originarios.
Por ello, propongo a la SEPI y a la Secretaría de Salud capitalina que fomenten estas dietas y promuevan sus beneficios”, subrayó.
En ese contexto, Bravo Espinosa señaló que si bien no hay un consenso generalizado, es un hecho que nutriólogos e historiadores propugnan por las ventajas de una dieta encaminada a revivir el tipo de alimentación de las culturas prehispánicas.
“Los pueblos originarios detentan una sabiduría propia de su cultura, que es conocida por su medicina herbolaria y las prácticas saludables, entre las cuales deriva una dieta prehispánica baja en carbohidratos, alta en proteínas y apegada, en su mayoría, a métodos de cocción que no implican la adición de grasas saturadas o procesamientos de alimentos”, explicó.
Bravo Espinosa destacó que la gastronomía nacional es resultado de diversos elementos gastronómicos de otros pueblos originarios, como la cocina afrodescendiente, filipina, china, española y francesa, a consecuencia de las distintas migraciones y momentos históricos.
