3 lecturas
Diego Cedillo
Si la obra escrita de Miguel Alemán Velasco, “si el águila hablara”, se hiciera realidad y el águila de la silla presidencial, en la cual se sienta cotidianamente el Presidente Andrés Manuel López Obrador, empezará a platicar, seguramente rememoraría que días como hoy, el país vivía hitos en su historia, pues en 1982, el expresidente Plutarco Elías Calles veía iniciar las operaciones el Banco de México y tan solo 57 años después José López Portillo anunciase la nacionalización de la banca.
Sin embargo, probablemente en sus años venideros, sin duda dicha ave replicará, la polémica frase choca “ay mojo”, al ver el sueño del Gral. Francisco Múgica, hecho realidad con la “tabazqueñización” de México, pues está claro que AMLO, ha puesto a uno de sus hombres de mayor confianza, su paisano Adán Augusto López Hernández, en una posición que más de un funcionario de primer nivel envidiaría.
Bien valdría la pena recordar, que en política no hay espacios vacíos, ya que ante el hueco que dejó Alfonso Romo en Palacio Nacional, seguramente este será ocupado por un hijo del cacao desde el Palacio de Cobián.
Y hablando de relevos, con lo ocurrido con Olga Sánchez Cordero, al ser electa Presidenta del Senado, será que la ministra en retiro sea capaz de poder fungir como contrapeso del titular de la JUCOPO, el senador Ricardito Monreal.
Pues no habrán de olvidarse las triquiñuelas de Monreal Ávila, al operar a favor de Sandra Cuevas en la Cuauhtémoc, hecho que aseguran los confidentes de este tunde-máquinas, que aún duele mucho en el núcleo duro de la 4T.
POST-IT
Sin embargo, lo que algunos ignoran, es la caballería oculta con la que contará Doña Olga como refuerzo en su batalla contra Monrealito, pues no habrá que olvidar que es Gobernación quien tiene la facultad para llevar las relaciones con los poderes legislativos.
¿Será que un tabasqueño desde Bucareli se volverá en el principal cabildero capaz de igualar las victorias de Rodrigo Díaz de Vivar, mejor conocido como el Cid Campeador?, ya que en los pasillos resuenan los apellidos De la Vega Asmitia.
