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Diego Cedillo
Pareciere que no han pasado los 500 años cuando -un día como hoy- el trotamundos Hernán Cortes escoltado por su ejército empezó la toma de Tenochtitlán, originando la conquista de México Es curioso como ante la cotidianidad, se deja de advertir lo que es evidente, como los siglos de historia que nos cuenta el Centro Histórico en la CDMX.
Ante tales desapercibimientos de los milagros cotidianos quizás el titular de la SEDATU, Román Meyer, deba ojear la obra escrita de Milan Kundera, “La insoportable levedad del ser” y percatarse más de los pequeños detalles que pasan incluso bajo sus narices.
Resulta que ayer Raymundo Riva Palacio ¡vaya!, que tundió a Meyer Falcon al referir que él y su Directora General de la Propiedad Rural, María Estela Ríos González fueron y serán los responsables de poner en jaque al Presidente Andrés Manuel López Obrador, al respecto de unos terrenos del Aeropuerto de Santa Lucia.
Valdría la pena destacar que Maria Estela, fue la Consejera Jurídica (posición que iba a ser para Ernestina Godoy, la actual Fiscal en la CDMX, pero eso ya será para otro día) de López Obrador cuando era Jefe de Gobierno, es más que claro, hay confianza entre ella y el Tabasqueño, quizás más de la que existe con su jefe, Meyer Falcón.
Alguien debería decirle al “Millenial” Romancito, que una limpia en su Secretaría, no estaría mal, para evitar problemas como el expuesto por mi colega Riva Palacio, pues es de destacar en la SEDATU, se siguen refugiando miembros del Cartel Inmobiliario de la Administración de Miguel Ángel Mancera.
Empezando por su Directora General de Inventarios y Modernización Registral, Griselda Martínez Vázquez así como una abogada: Claudia Nogales, ambas operadoras de las triquiñuelas de Mancera Espinosa desde la Consejería Jurídica de la CDMX.
POST-IT
Quizás la Secretaria de la Función Pública, Irma Sandoval debería poner un ojo en lo anterior, pues ante las omisiones de Meyer Falcón, no vaya a ser que alguien, ponga el dato en la Conferencia de Prensa, La Mañanera, del Presidente López Obrador y se arme la “chimoltrufa”.
