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La CDMX se convertirá en una Ciudad modelo, sí y sólo si se aprueba la Ley de Planeación del Desarrollo Sustentable. El proyecto es ambicioso, pues contempla una visión de largo plazo en materia de movilidad, medio ambiente, sustentabilidad hidráulica, desarrollo metropolitano, económico y social y planeación financiera.
Pero quien lo propone es la oposición en el Congreso local. El perredista Víctor Hugo Lobo Román y Federico Döring del PAN, plantean la propuesta desde siete ejes principales: concebir a la Ciudad a largo plazo; integrar los estudios de rigor científico; consolidar la construcción de un Plan General en un instrumento jurídicamente superior; elaboración de los instrumentos de planeación transparente; vincular los objetivos del sistema de planeación y el respeto a los derechos humanos; consolidar una junta de Gobierno plural y ciudadana; e incorporar a la planeación los temas de medio ambiente, movilidad, desarrollo hidráulico, metropolitano, económico y social ,bajo un esquema de soporte financiero. Un sueño casi imposible de alcanzar.
Y el oso de esta última sesión del periodo ordinario en el Congreso CDMX será para el PRD y su coordinador, Jorge Gaviño, quien promueve una iniciativa para hacer modificaciones al artículo 60 de la Ley de Derechos Humanos y en donde el PAN y su diputada Margarita Saldaña ya le ganaron el mandando haciendo lo propio y oportunamente.
Se trata de la modificación al artículo 60 para corregir el error y no dejar ambigüedades ni poner por encima el derecho de vivienda sobre el derecho a la propiedad como pudiera interpretarse tal y como quedó.
Lo que propone Gaviño muy difícilmente pasará porque no cumple con los 10 días reglamentarios para recibir observaciones, mismas que deberían discutirse, pero no será así porque el tiempo legislativo se los ha comido en su intento por reflectores.