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TRABAJADORES AL SERVICIO DE LA GRAN CIUDAD, APLAUDIERON LA MEDIDA DE LA PRÓXIMA GOBERNANTE de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum de acabar con la alta burocracia, pero sobre todo con los aviadores, y con ello ahorrar diez mil millones de pesos al año.
Sin embargo, recordaron que en toda la estructura del Gobierno capitalino existen 322 mil registros, desde el jefe de Gobierno hasta el más humilde barrendero.
Es decir, 322 mil personas (hombres y mujeres) quienes hacen posible que los servicios como agua potable y recolección de basura –entre muchos otros–, funcionen sin contratiempo, para satisfacer la demanda de 9 millones de habitantes, más cinco que diariamente se encuentran de tránsito.
La pregunta que surgió es que, por muchos aviadores que existan y sean dados de baja, ¿será suficiente para obtener ahorros por 10 mil millones de pesos al año?
La noticia causó confusión entre la base trabajadora, porque lo que menos quieren es perder sus fuentes de trabajo y de paso los ingresos que quincenalmente llevan a casa.
Están de acuerdo en que todo aquel que no trabaja sea dado de baja, pero no quienes son de base y diariamente acuden a sus áreas a realizar las tareas que les corresponden.
Los ahorros siempre son bienvenidos, pero sin que la base trabajadora sea recortada, porque a final de cuentas es el rostro del Gobierno atrás de la ventanilla, cuando el ciudadano acude a solicitar un servicio.
La capital de la República, aún con un personal limitado; 185 mil trabajadores, 90 mil policías, 7 mil trabajadores del STC-Metro, más la estructura de la alta burocracia hasta el jefe de Gobierno, pasando por las alcaldías, ofrece los servicios de bacheo, distribución de agua potable, reparación de luminarias, poda de árboles, desazolve, y otros servicios, indispensables para que la gran metrópoli cuente con ellos las 24 horas del día, los 7 días de la semana, los 365 días del año.
La otra pregunta que hacen los trabajadores es: ¿los recortes tendrán previsto todo eso? Lo veremos en el transcurso de 2019.
