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Ciudad de México.– Desde 2011, con la llegada de Ron Rivera al mando, y Cameron Newton como mariscal de campo, los Carolina Panthers han dejado el anonimato en la NFL para convertirse en un asiduo participante de los Playoffs; sin embargo, del mismo modo han sufrido de campañas intermedias perdedoras.
De 2013 a 2015 lograron tres títulos Divisionales consecutivos, incluido uno con marca de siete ganados, ocho perdidos y un empate (2014), en el tercero disputaron el duelo por el Vince Lombardi, aunque cayeron ante los Denver Broncos, encabezados por Peyton Manning, pero en 2011, 2012 y 2016, no logaron alcanzar la Postemporada.
Estos antecedentes convierten en un verdadero reto pronosticar el récord para esta temporada, aunque si mantienen esta tendencia, las Panteras sufrirán en 2018.
Para esta campaña la franquicia de Charlotte contará con nuevos coordinadores ofensivos y defensivos, en las personas de Norv Turner y Eric Washington, respectivamente, esto, aunado a la lesión del tacle titular Daryl Williams, en pretemporada, y la suspensión que acarrea el linebacker Thomas Davis, podrían propiciar un arranque lento para el equipo.
Por lo que sus esperanzas se cifrarán en el estado de Cam Newton, quien arriba a su octava campaña con 29 años, y con uno de los brazos más respetados de la iga.
SuperCam contará de nuevo con el apoyo en ataque del ala cerrada Greg Olsen. Además llegó más artillería para el cañón que tiene Newton en el brazo, con los arribos de Devin Funchess, Torrey Smith y Jarius Wright.
Para que el ataque aéreo funcione, deberán contar con un backfield respetable que le dé variedad a la ofensiva, por lo que el corredor Christian McCaffrey volverá a ser clave en las jugadas por tierra, y las incorporaciones de C.J. Anderson y Kenjon Barner potenciarán esta opción, para que los de Carolina del Norte repitan en Postemporada con la deuda del Super Tazón en la mira.
