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Aprende a adaptarte bien a la adversidad, a un trauma, tragedia, amenaza, o fuentes de tensión
La resiliencia es la capacidad que tienes para enfrentar los retos de la vida con eficiencia. Te ayuda a estar preparado para lo que venga en el futuro. También te facilita los cambios, te ayuda a resolver las adversidades de la vida cotidiana y te proporciona los recursos necesarios para superar los traumas.
La resiliencia es una fuerza fundamental para enfrentar los retos de la vida. Para empezar, tienes que reconocer que tú la diriges. Si dejas de culpar a los demás y te das cuenta cómo participas en las situaciones que vives, podrás crear un cambio. Basta de hacerte la víctima y de ir por la vida repartiendo culpas.
Si hay una situación que no te gusta, asume la responsabilidad para cambiarla. Buscar culpables de todo solo te quita energía y tiempo. Además, si esperas que el otro cambie, puede pasar tiempo o no ocurrir; la persona más afectada serás tú. Tampoco se trata de educar a los demás, de corregirlos. Ese es su problema. A ti lo que te interesa es estar mejor, ¿verdad? Asumir tu responsabilidad para cambiar las situaciones no te deja con la culpa, te da poder
