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Solo 15 de los 45 decretos aprobados por el Congreso de la Unión tuvieron origen en la Cámara Alta, lo que representa 33.3% del total
Redacción
Grupo Cantón
Ciudad de México.- La actividad legislativa del Senado de la República durante la actual Legislatura 2024-2028 muestra un bajo nivel de productividad: de septiembre a diciembre, solo 15 de los 45 decretos aprobados por el Congreso de la Unión tuvieron origen en la Cámara Alta, lo que representa 33.3% del total, mientras que en el mismo periodo se presentaron 746 iniciativas, de las cuales apenas tres fueron publicadas en el Diario Oficial de la Federación y entraron en vigor.
De acuerdo con reportes de seguimiento legislativo, el desempeño del Senado contrasta con el de la Cámara de Diputados, que concentra la mayor parte de los decretos aprobados. En este balance, algunos senadores de Morena y de los partidos aliados —Partido del Trabajo (PT) y Partido Verde Ecologista de México (PVEM)— figuran entre quienes han registrado un menor número de iniciativas propias, en un contexto general de baja producción normativa.
Morena cuenta actualmente con 62 senadores, lo que lo convierte en el grupo parlamentario mayoritario. En conjunto con el PT y el PVEM, la coalición oficialista mantiene el control del Senado y la capacidad para aprobar reformas ordinarias y constitucionales; sin embargo, los datos disponibles reflejan un rezago en la generación de decretos desde esta Cámara.
Entre los legisladores señalados por su bajo número de propuestas propias o por registrar múltiples inasistencias, justificadas y no justificadas, se encuentran Félix Salgado Macedonio (Morena), Citlalli Hernández (Morena) y Jaime Bonilla Valdés (PT), según información pública del propio Senado.
En cuanto al contenido de las iniciativas, Salgado Macedonio ha promovido propuestas en materia de migración, uso de símbolos patrios, eliminación de pensiones y privilegios para exfuncionarios, así como mecanismos de participación ciudadana como foros y parlamentos juveniles. También ha respaldado reformas impulsadas por el Ejecutivo federal, entre ellas las relacionadas con el nepotismo y el sistema judicial. No obstante, el avance legislativo de estas propuestas ha sido limitado.
El balance general apunta a un Senado con mayoría política suficiente, pero con resultados acotados en términos de producción normativa efectiva.
