44 lecturas
Por Miguel García Conejo
@kurt2767
Este fin de semana, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, en compañía de la gobernadora del Estado de México, Delfina Gómez Álvarez, realizaron un recorrido de supervisión del Tren Suburbano Lechería–AIFA. El elemento sustantivo de la visita, y el que se informó oficialmente, es que la obra se encuentra concluida.
De acuerdo con la autoridad, al momento solo se afinan detalles complementarios y se realizan pruebas técnicas, con la expectativa de que el sistema entre en operación durante el periodo vacacional de Semana Santa de 2026.
La obra representa un impulso significativo para la conectividad de la zona metropolitana del Valle de México, no solo de cara al periodo festivo que implicará el próximo Mundial de Futbol en México, sino como una alternativa estratégica de movilidad para toda la región.
Este proyecto forma parte de los grandes ejes de transformación desarrollados por el gobierno federal desde la pasada administración y que hoy han modificado la vida cotidiana de millones de personas.
Se dice fácil, pero esta obra, junto con la consolidación del Tren Interurbano “El Insurgente”, los proyectos de Metrobús y el Trolebús Elevado, han cambiado la realidad de quienes ya no pierden horas enteras de su vida en un transporte público deficiente.
Ahí radica gran parte del respaldo ciudadano a la Cuarta Transformación: en hechos visibles del día a día, donde la población constata el interés del gobierno por mejorar las condiciones de movilidad de la clase trabajadora. Pésele a quien le pese, son hechos, no palabras.
