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El municipio cerró como un foco rojo de inestabilidad política y violencia; la crisis se agravó con el asesinato del primer regidor, Alejo Cedillo Cedillo
Mario López
GRUPO CANTÓN
El municipio de Ocuilan se convirtió en 2025 en uno de los más señalados de la entidad mexiquense por un clima de conflicto político interno, denuncias de presunto abuso de autoridad y una profunda crisis de gobernabilidad que trascendió al ámbito estatal.
A lo largo del año, el nombre del municipio apareció de manera recurrente en la agenda pública no solo por señalamientos administrativos, sino también por hechos de violencia que evidenciaron la fragilidad institucional.
Cabe destacar que uno de los episodios más graves ocurrió el 20 de marzo de 2025, cuando el primer regidor, Alejo Cedillo Cedillo, fue asesinado a balazos frente al Palacio Municipal, en pleno centro de Ocuilan.
El crimen, perpetrado a plena luz del día, generó conmoción y encendió alertas sobre la seguridad y la estabilidad política del ayuntamiento. La Fiscalía General de Justicia del Estado de México inició investigaciones y realizó detenciones, sin que hasta ahora se hayan disipado las dudas sobre el trasfondo político del ataque.
Paralelamente, durante el segundo semestre de 2025, regidores del propio Cabildo denunciaron públicamente al alcalde Juan Luis Gordillo Abundis por presuntas prácticas irregulares dentro de la administración municipal. Entre los señalamientos destacan nepotismo, contratación de presuntos “aviadores”, hostigamiento, amenazas y violencia política contra ediles que exigían transparencia y rendición de cuentas. Las acusaciones fueron presentadas ante instancias como el Órgano Superior de Fiscalización del Estado de México (OSFEM) y el Congreso local, lo que elevó el conflicto al plano institucional.
Aunque no existe, hasta el cierre de 2025, una orden de aprehensión o vinculación a proceso directa contra el alcalde por abuso de autoridad, el caso de Ocuilan se volvió emblemático por la suma de factores: denuncias internas, confrontación política, señalamientos de corrupción y un asesinato que evidenció un entorno de alta tensión.
Para analistas y organizaciones civiles, Ocuilan representa en 2025 un ejemplo crítico de cómo la falta de controles internos, el desgaste político y la impunidad pueden derivar en escenarios de ingobernabilidad, colocando a la ciudadanía en medio de disputas de poder y riesgos constantes. Un caso que sigue abierto y bajo la lupa pública.