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Por Xóchitl Bravo Espinosa
Oposición, responsable de la violencia
Quienes pertenecemos a la Transformación expresamos nuestra enérgica condena a los actos de violencia en el Zócalo durante la llamada marcha de la Generación Z. A través de los medios de comunicación y redes sociales, conocimos de las agresiones del “bloque negro” contra las y los policías que nunca agredieron y sólo realizaban tareas de contención.
Pero hay que preguntarse quiénes están detrás de estas acciones que manchan la democracia que se vive en el país. Fueron los de siempre: los de la Marea Rosa, los del PAN, los del PRI, los conservadores, los grandes empresarios que sólo quieren llevar agua para su molino. Son los traidores de la Patria; los que no pagan impuestos; los que se proclaman demócratas, pero mienten; los que incitan a los jóvenes a la violencia y los engañan.
La violencia que se vivió este sábado demuestra que la oposición sigue muy molesta por la aplastante victoria de la Cuarta Transformación en las urnas en 2018 y 2024. Les cala hasta los huesos la indiscutible aprobación ciudadana que tiene nuestra Presidenta Claudia Sheinbaum. No soportan saber que el pueblo los rechaza, porque es una derecha que nada más vela por sus propios privilegios.
Como lo han hecho históricamente, intentan imponer una narrativa distorsionada de la realidad de nuestro país, una que se ajusta a sus intereses económicos y que menoscaba los esfuerzos de millones de mexicanos que trabajan día tras día para contribuir a la transformación.
Contrario a ellos, en la 4T atendemos las causas que originan las desigualdades. Para nosotros, los jóvenes no son el futuro de México, sino nuestro presente. La razón es simple: para que haya un buen futuro para todas y todos, se debe construir un buen presente, y eso hacen los gobiernos de la Transformación.
Los que venimos de la lucha de la izquierda, de las movilizaciones, de abajo, reafirmamos nuestro respeto al derecho a la libre manifestación. Toda protesta pacífica forma parte esencial de la vida democrática y es una conquista social. Por más llamados a la violencia que haga la oposición, siempre diremos no a la represión, porque la vivimos en carne propia con los gobiernos neoliberales. Nuestro movimiento seguirá del lado de la verdad, de las libertades, de la paz y del pueblo.
