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REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La tensión en Ixtlahuaca volvió a estallar luego de que vecinos de San Ildefonso detuvieran a una mujer señalada de intentar robar una vivienda. El hecho, que rápidamente reunió a decenas de pobladores, evidenció un ambiente social marcado por el cansancio y la falta de confianza hacia la autoridad local. La multitud rodeó a la presunta responsable en un acto que estuvo a punto de convertirse en una agresión mayor.
Elementos municipales acudieron al llamado de auxilio y lograron intervenir antes de que la situación escalara, trasladando a la mujer para su valoración y proceso legal.
Sin embargo, el incidente reafirma la percepción comunitaria sobre la incapacidad del ayuntamiento para frenar la actividad delictiva que se expande por colonias y barrios bajo la administración de la alcaldesa María Guadalupe Díaz Avilez.
Los habitantes denuncian que los patrullajes son insuficientes y que la respuesta oficial llega tarde o de forma irregular. “Vivimos inseguros todos los días; la presidenta municipal no ha podido controlar nada”, reclamó Miguel Ángel Torres, vecino de la zona. Laura Mendoza, residente cercana, lamentó que la población esté actuando por desesperación: “Uno ya no sabe si la policía va a llegar o no. Por eso la gente se defiende sola”.
