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Habitantes de Lomas de Cuautitlán y Lomas de San Francisco Tepojaco demandan frenar la construcción del proyecto federal Casas del Bienestar
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
El municipio de Cuautitlán Izcalli enfrenta una tensión vecinal en aumento tras el anuncio del proyecto Casas del Bienestar, impulsado por el gobierno federal. La medida generó el rechazo de cientos de vecinos de Lomas de Cuautitlán y Lomas de San Francisco Tepojaco, quienes advierten que la instalación de miles de viviendas nuevas pondría en riesgo la frágil infraestructura de la zona.
El plan, que contempla la edificación de hasta seis mil unidades habitacionales en terrenos municipales, ha sido señalado por los residentes como una decisión apresurada. “No estamos en contra de la vivienda social, pero esta zona ya no aguanta más. Cada lluvia inunda las calles, el drenaje está destruido y no hay presión suficiente de agua. Traer más gente sería un desastre”, expresó Roberto Mendoza, vecino desde hace quince años.
El predio destinado al desarrollo figuraba originalmente como área para equipamiento urbano. Sin embargo, tras recientes ajustes administrativos, fue reclasificado como suelo habitacional, lo que ha desatado sospechas de irregularidades. Los colonos aseguran que el cambio se realizó sin consulta pública y en contradicción con el plan municipal de desarrollo urbano.
Las autoridades locales han prometido mesas de trabajo y estudios técnicos sobre impacto ambiental, movilidad y abasto de agua. Sin embargo, entre los colonos predomina la desconfianza. “Promesas hemos escuchado muchas. Nos hablan de rehabilitar avenidas y reforzar el drenaje, pero aquí seguimos esperando desde hace años”, señaló Carlos Ortega, vecino de Tepojaco.
La gestión de Daniel Serrano Palacios se encuentra bajo fuerte presión. Por un lado, el proyecto representa un compromiso federal; por el otro, enfrenta el reclamo de comunidades que consideran rebasada su calidad de vida. Analistas advierten que, si no se alcanza una solución consensuada, el edil podría enfrentar uno de los conflictos sociales más delicados de su administración.
