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REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
La desesperación volvió a las calles de Toluca este viernes. Con pancartas y rostros marcados por el cansancio, padres de niños con cáncer bloquearon el Paseo Colón, frente al Hospital para el Niño, en una manifestación que evidenció nuevamente la crisis en el sistema de salud mexiquense.
La carencia de medicamentos oncológicos, quimioterapias suspendidas y estudios retrasados mantiene en riesgo la vida de decenas de menores que dependen de tratamientos continuos para sobrevivir.
El reclamo fue contundente: no piden favores, exigen que el Estado cumpla su obligación de garantizar atención médica.
Los manifestantes denunciaron que desde hace más de un mes el hospital enfrenta una escasez severa de fármacos esenciales entre ellos metotrexato, vincristina y ciclofosfamida indispensables para las terapias oncológicas.
Además, los estudios de imagen y laboratorio han sido pospuestos por falta de reactivos y personal especializado.
“Cada día sin medicamento es una sentencia para nuestros hijos”, gritó entre lágrimas Mariela Ramírez, madre de un pequeño con leucemia. “No es justo que tengamos que cerrar calles para que nos escuchen. Queremos tratamientos, no promesas”, añadió mientras padres alzaban fotografías de sus hijos internados en el nosocomio.
El cierre de la vialidad provocó un severo congestionamiento que se prolongó por más de dos horas. Elementos de tránsito redirigieron el flujo vehicular, mientras autoridades del Instituto de Salud del Estado de México (ISEM) acudieron a dialogar con los inconformes.
Tras una reunión improvisada, los funcionarios prometieron restablecer el abasto en los próximos días y abrir una mesa de seguimiento con los familiares.
