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Volvió a ser dueño de sus temas con Creedence Clearwater Revival y celebró sus 80 años
Gaby Gazcon
CDMX. Reconocido por su trabajo como líder y vocalista principal del grupo de rock Creedence Clearwater Revival creador del “sonido Creedence” popular a fines de los años 60 e inicios de los 70.
Llego a México como parte de su gira “Legacy: The Creedence Clearwater Revival Years”, celebrando su cumpleaños número 80, además festejando que la leyenda del rock recupero los derechos como compositor de algunos de los grandes éxitos de Creedence Clearwater Revival, 20 temas de los cuales volvió a grabar en “Legacy” que es el título del más reciente álbum.
A sus 80 años, John Fogerty se declara sereno y conforme, gracias a su familia y a la recuperación de los derechos de sus canciones, las cuales disputó por 50 años con Fantasy Records, su antiguo sello discográfico.
“Estoy muy feliz en estos días. Normalmente tengo una sonrisa en el rostro, o al menos pienso de manera feliz. Mi vida es muy buena ahora, y ciertamente, no tengo razones para quejarme, las cosas están bastante bien”, dijo John Fogerty en un encuentro con los medios de comunicación
He decidido dejar el pasado en el pasado y tomar cada día bendecido. Disfrutar de las cosas maravillosas que me pasan ahora”, añadió.
Un legado familiar
“Legacy: The Creedence Clearwater Revival Years” fue lanzado en agosto y con él se incluyeron nuevas versiones de 20 himnos con los que la guitarra de Fogerty marcó la historia: “Have You Ever Seen the Rain?”, “Fortunate Son” y “Bad Moon Rising”, entre otros.
John Fogerty recordo a Juan Gabriel durante la conferencia de prensa: “Solo hable con el por telefono y no mucho, por la barrera del idioma, pero lo admiraba mucho porque el componia su propia musica y que para mi fue un honor que halla interpretado una canción de mía”, misma que solo la cantaron juntos en 2017 a traves de un holograma, en el homenaje al divo de Juarez, se trato del tema “Have You Ever Seen The Rain”, que Juan Gabriel hizo como cover llamándolo “Gracias al Sol”.
Ahora, a diferencia de aquellos años dorados en los que el rock se definió para la eternidad, él no actúa solo ni con sus antiguos compañeros, sino acompañado de sus hijos Shane y Tyler, un elemento que enriquece el resultado final.
“La vida tiene altibajos, pero como familia hemos creado una especie de vacuna contra esos problemas. Nos mantenemos constantes, hacemos la música que amamos y damos lo mejor en cada show”, dijo.
El show en el auditorio
Desde fuera del Auditorio, no importando que era lunes, el ambiente era el de una fiesta rockanrolera. Dentro, ya se veia la mezcla generacional. Hombres de traje que en su juventud hicieron de Proud Mary su himno, parejas que crecieron con la música de los años 70, jóvenes con el cabello largo y hasta veinteañeros acompañados de sus padres. Todos tenían claro que esa velada estaba dedicada a una leyenda viviente del rock: John Fogerty.
A las 9:00, tras un video que hablaba de su nuevo disco y del proceso creativo junto a su familia, aparecieron en escena sus hijos Shane y Tyler. Un instante después, salió Fogerty con su inseparable guitarra.
De inmediato aplausos y el rugido de la primera canción de la noche, “Bad Moon Rising”. En las primeras filas ondeaba una bandera de México mientras se enlazaban los acordes de “Up Around the Bend”, confirmando que la gira The Creedence Clearwater Revival Years no era solo un repaso: era una celebración del tiempo y de la memoria.
“Estoy muy feliz. ¡Ciudad de México, hola! Estoy tan contento de estar de regreso aquí. Todos estamos felices de tocar para ustedes esta noche. Y saben, acabo de recuperar mis canciones. Voy a tocar cada una de ellas. Así que, ¡vamos!”, dijo emocionado y el público respondió coreando su nombre.
Túnel del tiempo
Con “Green River” y “Born on the Bayou”, el Auditorio se transformó en una cápsula de tiempo. Fogerty, ahora con 80 años, parecía que el tiempo no pasaba por él. Entre canciones compartió anécdotas de su guitarra Rickenbacker de 1969, la misma que sonó en Woodstock.
Habló de éxitos fulminantes, de la caída de Creedence en 1972, de las pérdidas personales… y de cómo su esposa Julie, después de más de cuatro décadas, le devolvió aquella guitarra como regalo de Navidad.
“Compré esta guitarra a inicios de 1969, la misma con la que toqué en Woodstock y con la que grabé tantos éxitos de Creedence. Hace muchos años se la regalé a un niño y no volví a verla. Pasaron más de cuatro décadas hasta que mi esposa Julie salió a buscarla por todo Estados Unidos. La encontró, me la dio en Navidad y cuando la abrí debajo del árbol… lloré como un niño”, confesó.
El setlist fue un desfile de clásicos: “Rock and Roll Girls”, “Lodi”, “Run Through the Jungle”. Y, en cada pausa, respondía con un sencillo “I love you too” a quienes le gritaban desde el público.
Pero más allá de los himnos, la velada tuvo un sello íntimo y familiar. Fogerty presentó a su familia sobre el escenario: sus hijos Shane y Tyler, su esposa Julie desde un costado, su hija Kelsey tocando la guitarra junto a él. Todos participaron en la emotiva interpretación de “Joy of My Life.
El recinto enloquecio cuando llegaron los clásicos más esperados: “Have You Ever Seen the Rain”, que convirtió al recinto en un coro unísono; “Cotton Fields” y “Down on the Corner”, que pusieron a bailar a todos; y el estallido de “Fortunate Son”, canción emblemática contra la guerra de Vietnam que sigue sonando tan vigente como hace 55 años.
