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Poco más de 309 mil 673 habitantes, equivalentes al 51.3% de su población, sobreviven con carencias económicas y sociales que limitan su desarrollo
POR JUAN R. HERNÁNDEZ
GRUPO CANTÓN
Tecámac, municipio gobernado por Rosi Wong Romero, enfrenta un escenario complejo en materia social: más de la mitad de su población vive en condición de pobreza. De acuerdo con el Informe Anual sobre la Situación de Pobreza y Rezago Social 2025, 309 mil 673 habitantes, equivalentes al 51.3% de su población, sobreviven con carencias económicas y sociales que limitan su desarrollo.
El estudio revela que 36.1% de los tecamaquenses son vulnerables por carencias sociales, mientras que 40.2% lo son por ingresos insuficientes. Aunque el índice de pobreza extrema alcanza “solo” al 4.2% de los habitantes (25 mil 332 personas), los datos reflejan un municipio con profundas desigualdades: el ingreso laboral promedio mensual apenas llega a 5 mil 935 pesos, insuficiente para adquirir una canasta básica de calidad.
En educación, el rezago persiste. Cerca de 12.4% de la población no ha concluido la instrucción básica, mientras miles de jóvenes abandonan la escuela para integrarse al mercado laboral en condiciones precarias. Este rezago educativo, combinado con la falta de acceso a servicios de salud y seguridad social, coloca a Tecámac en una posición de vulnerabilidad estructural pese a que el municipio se clasifica con rezago social “muy bajo” en comparación nacional.
La carencia alimentaria es otro desafío: más de 75 mil personas reportan dificultades para acceder a una dieta nutritiva y de calidad. A ello se suman deficiencias en servicios básicos de vivienda, lo que genera focos de marginación en varias colonias.
El gobierno municipal recibió en 2024 más de 98 millones de pesos del Fondo de Aportaciones para la Infraestructura Social Municipal (FAISMUN), destinados a obras de urbanización, mejoramiento de vivienda, agua potable y electrificación. Sin embargo, los indicadores muestran que las acciones no han sido suficientes para reducir de manera significativa la pobreza estructural.
Mientras Tecámac crece como polo urbano e industrial del Estado de México, su población enfrenta una realidad marcada por la desigualdad y la insuficiencia de políticas públicas para garantizar derechos básicos como educación, salud y alimentación.
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