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Por Ricardo Sevilla
Un expediente al que este comunista tuvo acceso revela que investigaciones de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) apuntan directamente a Grupo Salinas, específicamente a Arrendadora Internacional Azteca S.A. de C.V., en relación con una presunta red de lavado de dinero y corrupción.
La empresa pertenece al magnate Ricardo Salinas Pliego.
Y ojo con esa información porque esa red estaría directamente vinculada a Luis Cárdenas Palomino, quien fuera cercano a Genaro García Luna y hombre de todas las confianzas de Felipe Calderón Hinojosa.
Hoy estos dos sujetos, cercanos a Calderón, están en prisión y son considerados delincuentes tanto por autoridades mexicanas, como por autoridades estadounidenses.
Lo interesante es que esta trama ha empezado a ser desenredada por las autoridades mexicanas.
Y eso no es cualquier cosa, porque uno de los protagonistas es justamente el evasor de impuestos, Salinas Pliego, cuyos embates contra el gobierno federal se han recrudecido en los últimos días.
Se trata de una de las tramas de corrupción más espinosas y elaboradas de los últimas décadas, que involucra a importantes figuras del ámbito empresarial y político.
Desde luego, esta clase de trabajos periodísticos no gustan nada al dueño de TV Azteca.
Y es que la empresa Adamantium Security, de acuerdo con la UIF, estaría ligada al dueño de la tienda de usura Elektra.
El teatro de la “persecución política” no le funcionó.
Transacciones financieras que en apariencia eran normales, ahora son vistas como parte de un intrincado esquema de lavado que desvió millones de pesos de fondos públicos.
Algo llama más la atención: al publicar el colega Ignacio Suárez, gran conocedor del balompié, ha salido sostiene que esta empresa es precisamente la que tiene demandado al empresario Fidel Kuri Grajales en su tema con el Club Deportivo Veracruz por el préstamo de 139.2 mdp.
La pregunta es: ¿hasta dónde llegarán los pulposos brazos corruptos de Salinas Pliego? Y agrego otro cuestionamiento: ¿Hasta cuándo le pondrán un alto?