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Dos sujetos que exigían “cuota” a vecinos de la colonia Centro desataron una refriega al chocar con fuerzas estatales y federales en pleno Capulhuac.
REDACCIÓN
GRUPO CANTÓN
En el municipio de Capulhuac se registró enfrentamiento armado entre fuerzas de seguridad y presuntos integrantes de una célula criminal que dejó como saldo la detención de dos hombres, señalados por delitos de extorsión y robo a casa habitación.
La acción policial se desarrolló en plena zona urbana, en la colonia Centro, donde testigos relatan escenas de pánico y caos.
De acuerdo con autoridades de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM), el operativo se activó tras recibir una denuncia ciudadana que alertaba sobre el allanamiento a una vivienda.
La víctima señaló que los agresores, además de robar pertenencias, se identificaron como miembros de un grupo criminal y exigieron el pago de una “cuota” de protección, una práctica que ha comenzado a replicarse en distintos puntos del Valle de Toluca.
La intervención fue inmediata. Elementos de la Policía Estatal, en coordinación con la Guardia Nacional y corporaciones municipales, rastrearon a los sospechosos hasta la esquina de Vicente Guerrero e Ignacio Zaragoza.
Al intentar detenerlos, los uniformados fueron recibidos a balazos. La respuesta fue rápida y contundente: tras el intercambio de disparos, Eduardo “N”, de 31 años, y Diego “N”, de 35, fueron arrestados sin que se registraran bajas entre las autoridades. En la camioneta donde viajaban se hallaron armas de fuego y varios objetos presuntamente robados.
La escena fue acordonada por varias horas mientras peritos recababan indicios del enfrentamiento.
Sin embargo, lo que más persiste es la sensación de inseguridad entre los vecinos. “Esto ya no es nuevo, pero cada vez está más cerca de nuestras casas”, comentó doña Carmen, habitante de la colonia Centro, visiblemente angustiada. “Vienen, amenazan, roban, y hasta disparan como si nada. Estamos cansados”.
Don Javier, comerciante de la zona, coincidió en que la violencia se ha normalizado. “Ya no basta con cerrar temprano o poner rejas. Estos tipos operan a cualquier hora. Necesitamos más vigilancia, pero sobre todo que se desarticulen las bandas, no solo detener a los que caen por casualidad”, sentenció.
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