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Por Lengua larga
Hay una concejal que no aplica aquello que reza que “lo que bien se aprende, nunca se olvida” y es que aunque su mentora fue la petista, Beatriz Hernández, la funcionaria, Jaqueline Fernández, parece no haber entendido nada.
La mujer recibió el mote de “la sirvienta” y es que se dice que es la fiel acompañante de Hernández y que ella hace y deshace al antojo de Betty y no se lo que ella quiere o medio sabe hacer.
Aunque la realidad es que no sabe hacer nada. Ahora verá, esta columnista decidió llamarla “la más rápida del oeste” porque la mujer llevó a cabo la sesión más rápida de concejo que se ha realizado en la demarcación Miguel Hidalgo.
La mujer citó a los concejales para llevar a cabo una sesión para aprobar el calendario de las sesiones de su comisión, esa que más de tratar temas de grupos prioritarios parece la de los asuntos sin importancia.
Bueno, parece que Fernandez utilizó octubre, noviembre, diciembre, enero, febrero, marzo, abril y mayo de prueba para saber qué significaba ser concejal, aunque no entendió la dinámica y solo se hizo pato.
El día de ayer su sesión duró la mínima cantidad de 6 minutos, ya ni lo que hacen de traslado los concejales de su casita a la alcaldía. ¡Qué burla!
Pero bueno, la mujer necesito de 8 meses para poder hacer su calendario de reuniones con los concejales; es importante explicarle a usted querido lector, que esta comisión de atención a grupos prioritarios ya la había encabezado Hernández, pero parece que su expertos no fue transmitido a su fiel mucama.
¡Qué vergüenza que Fernández haya cobrado o más bien robado el dinero de su sueldo por ir a sentarse y hacer horas nalga!
