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Por Lengua larga
El cártel inmobiliario ha dado mucho de qué hablar en la Ciudad de México, antes de hablar de lo que sucede se debe tener presente que este grupo criminal de puro personaje de cuello blanco comenzó y creció en la alcaldía Benito Juárez.
Incluso, no está de más recordar, que uno de los panistas que gobernó esta alcaldía está en la cárcel tras describirse la red de corrupción que hay en esta demarcación.
Pero bueno, aquí no se viene hablar de Christian Von Roehrich y su trágica vida con un final de cuento y no precisamente de hadas sino de cómo el cártel sigue operando y no solo en la Ciudad de México.
Estos actos de corrupción se propagaron por las alcaldías Miguel Hidalgo, gobernada por un panista, Azcapotzalco que fue gobernada por otra panista y en Álvaro Obregón, así es, como usted adivinará liderada en la pasada administración por una panista.
Pero ahora la Ciudad de México no es suficiente y Mauricio Tabe, actual gobernante de los miguelhidalguenses en la capital del país, dejó sus obligaciones en la demarcación para viajar a Chihuahua a ver a su íntimo y mejor amigo, Marco Bonilla.
¿Para qué? para mostrarle cómo es que opera el cártel inmobiliario y como debe de hacer las cosas en el municipio de Chihuahua.
Recientemente la diputada de ese estado, Brenda Ríos y el Grupo de Morena denunciaron al actual alcalde de Chihuahua, por actos de corrupción inmobiliaria y si aunque no lo crea Chihuahua, está catalogado como territorio sísmico así que usted dirá.
Vaya que eso de emprender a Tabe si le gusta pues ya anda con miras en el norte mientras que su alcaldía está llena de inseguridad.