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“Sigue viviendo ahí, por eso Claudia no se ha cambiado (…), está escondido en Palacio Nacional”, dice Elena Chávez, la autora de un libro infame y mediocre que ahora se estrena como psíquica; ¡no!, dice otro, conocido por sus ficticias fuentes de palacio “(…)está en Tabasco, custodiado por más de 30 militares, usa camionetas blindadas, y por línea directa se comunica con el senado y con Claudia” ; otro añade ¡cobra pensión de 20 mil pesos! (cantidad que, es su pensión de retiro del ISSSTE por haber sido funcionario público y que él mismo mencionó en una mañanera) Sólo en esto último hay parte de razón, aunque la tergiversan mencionando que a los expresidentes les quitó su pensión y el en cambio sigue con ella.
Lo que no dicen es que la pensión de los presidentes, por ejemplo, Felipe Calderón percibía anualmente más de 54 millones de pesos, pero sigamos con los bulos, en el periódico Reforma se afirma: “la orden de ratificar a Rosario Piedra vino de arriba, por una razón de estado” y cita como prueba el supuesto cabildeo de Adán Augusto, según ellos, la mano que ordenó la ratificación de Rosario Ibarra vino de tabasco porque Adán Augusto es tabasqueño, ¡vaya lógica! deberían admitir que lo extrañan tanto como nosotros, deberían admitir que como la actual presidenta “no da nota” por ser concisa, pero contundente e incisiva, es difícil que la oposición encuentre anclas para bordar sus noticias falsas, ¿qué hacen?, revivir la imagen presidencial del hombre que les dio con todo y les quitó todo: Andrés Manuel López Obrador y que, si acaso tiene humor de entrar a una red social, estará seguramente riéndose como acostumbra de la mente acalorada de los textoservidores que de paso lo están volviendo omnipresente y hasta mítico.
Les cuesta mucho acostumbrarse a que una mujer haga uso del poder que le dio el pueblo, les cuesta mucho creer que las decisiones de las cámaras se hagan por mayoría consensuada y que esa mayoría, otorgada por el pueblo, marque el ritmo sin necesidad de ”teléfonos rojos ni líneas directas”
En Palacio Nacional no hay fantasmas, ni teléfonos rojos, ni decisiones detrás de “las faldas” de la presidenta, sino una mujer con voz, talento, inteligencia y fuerza para gobernar.
Ana María Vázquez
Escritora/Dramaturga
@Anamariavazquez