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Terrenos, joyas, automóviles, fondos de inversión y hasta donativos “generosos”, sobresalen en declaraciones
REDACCIÓN, GRUPO CANTÓN
Ciudad de México.- En un contexto donde el discurso de austeridad había sido una bandera central en la administración pública de la Ciudad de México, el gabinete de Clara Brugada presentó un notable contraste con los principios promovidos. Los altos funcionarios que conformaban su equipo habían declarado una serie de bienes que iban desde fondos de inversión, propiedades, joyas, automóviles, y hasta donaciones significativas.
Estos activos, que incluían un fondo de inversión de más de 13 millones de pesos, y donativos que ascendían a un millón de pesos, pusieron en entredicho, el mensaje de contención de gastos que caracterizaba al gobierno. Uno de los casos más destacados, fue el del secretario de Gobierno, César Cravioto. En 2023, declaró una remuneración de 1.2 millones de pesos, no reportó propiedades, en su última declaración patrimonial.
Este contraste, entre lo declarado en años anteriores, y los bienes registrados, levantó interrogantes sobre la consistencia en sus reportes patrimoniales. Otro funcionario relevante, fue Pablo Vázquez Camacho, secretario de Seguridad Ciudadana, quien informó que, además de su salario público de más de 1.5 millones de pesos anuales, poseía una inversión en dólares, y un automóvil Honda valorado en 385 mil 900 pesos.
Juan Pablo de Botton, secretario de Administración y Finanzas, también figuró entre los casos más llamativos, no solo reportó ingresos por su cargo público, sino también 2.1 millones de pesos, provenientes de una empresa de la cual era accionista, además de un millón de pesos en donaciones.
En 2023, adquirió un departamento a crédito por 2.7 millones de pesos, lo que representaba su único bien inmueble declarado. La situación no fue menos sorprendente en el caso de Alejandra Frausto Guerrero, entonces secretaria de Turismo, quien, en su última declaración como titular de Cultura en el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, reportó la propiedad de un departamento valorado en 3.5 millones de pesos, además de un terreno y varias herencias, incluyendo obras de arte valuadas en 500 mil pesos.
Frausto Guerrero también declaró ingresos anuales por más de 1.6 millones de pesos durante su último año en el gobierno federal. Alejandro Encinas Rodríguez, secretario de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana, fue otro de los funcionarios con declaraciones llamativas. En su declaración patrimonial de 2023, reportó fondos de inversión por más de 13 millones de pesos.
Ana Francis López Bayghen, secretaria de Cultura, también presentó una considerable acumulación de bienes. Informó sobre la posesión de propiedades con un valor superior a los 2.6 millones de pesos, además de mobiliario y automóviles con un valor estimado en más de 200 mil pesos. A pesar de no haber especificado los detalles de estas propiedades, López Bayghen notificó ingresos anuales por más de 400 mil pesos en su labor previa como diputada local.
Finalmente, Nadine Flora Gasman Zylbermann y Araceli Damián González, declararon montos fuera de la austeridad.
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