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Dejará la alcaldía con varias irregularidades en la compra de vehículos, equipo de vigilancia e iluminación, etcétera
Omar Montalvo
Ciudad de México. – Las elecciones de 2021 en Azcapotzalco le dieron a la panista Margarita Saldaña la oportunidad de rescatar el espacio a público que estuvo abandonado en el trienio del morenista Vidal Llerenas (2018-2021), pero dejará este gobierno con más casos de presunta corrupción en varios ámbitos, que incluso han sido investigados por entidades auditoras. Al carecer de resultados Saldaña Hernández no logró su reelección.
Una de las primeras irregularidades que se manifestó en su gobierno, fue cuando en 2021 concejales de Morena denunciaron la posibilidad de sobrecostos en el presupuesto participativo cuyo presupuesto fue de 125 millones de pesos, donde el gobierno panista impuso la instalación de cámaras de videovigilancia. Para 2022 como su primer año de gobierno, alcanzó un pico de hasta 83 por ciento de personas que consideraron ante el INEGI vivir en una demarcación muy peligrosa.
Aunque no sólo la percepción de inseguridad fue un indicador, pues el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) añadió que fue una de las alcaldías con más feminicidios en el país, pues hubo un incremento del 50%, además de mayor incidencia en delitos como asaltos en sus distintas modalidades, extorsión y narcomenudeo.
Implementó el modelo panista Blindar Azcapo, para hacerle frente a esta problemática, pero no mejoró las condiciones de inseguridad en la demarcación y sólo representó un gasto de 99.7 millones entre la contratación de policías y adquisición de vehículos de seguridad.
El mismo año, debido a la falta de vehículos operativos en Azcapotzalco, la administración de Margarita Saldaña adquirió vehículos por 38.7 millones de pesos. La compra llamó la atención del Órgano Interno de Control (OIC) en la alcaldía, pues presuntamente los automotores adquiridos no correspondían a los solicitados.
Mientras que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) indagó aún más las operaciones comerciales en Azcapotzalco y descubrió que en 39.5 millones de adquisiciones a través de 78 contratos, no se acreditó la entrega de los bienes comprados con recursos de la alcaldía, ya que no tuvo los documentos necesarios, ni las evidencias físicas.
Algunos de los contratos involucrados fueron para la adquisición de material eléctrico para atender las luminarias, pero las irregularidades en este rubro fueron denunciadas meses anteriores por los concejales en Azcapotzalco.
Desde el Congreso local también se acusó que el gobierno panista permitió el crecimiento a proyectos inmobiliarios. Saldaña Hernández ha tratado de justificar que no es su competencia el auge de los complejos que provocan mayor escasez de agua; sin embargo, en su campaña de 2024, se comprometió a frenar los proyectos inmobiliarios.
Tan sólo en 2023, la alcaldía otorgó 18 manifestaciones de construcción que representaron hasta 975 nuevas viviendas. También durante la contienda electoral, Saldaña prometió rehabilitar los Centros de Desarrollo Infantil (Cendis).
En este rubro el OIC detectó que la alcaldía no destinó todos los recursos para la alimentación de menores de edad asistentes a los Cendis, pues de un total de 66 mil raciones de comida, sólo pudo comprobar la entrega de 12 mil 643. Incluso su gobierno redujo los recursos públicos disponibles para Cendis de 4 a 3 millones de pesos en 2023.
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