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María Cardona fue favorecida por el gobierno de Yucatán; un exregidor posee una vivienda de la inmobiliaria de él
Omar Montalvo
Ciudad de México.- Uno de los matrimonios más polémicos, por las relaciones políticas que implican, es el de María Cardona con Carlos Orvañanos, quien será el próximo alcalde de Cuajimalpa. Esto porque, además de crear varias empresas mientras él fue funcionario en el estado de Quintana Roo, panistas que ocupan cargos públicos les han facilitado contratos.
Un ejemplo de ello es Eduardo Rivera Pérez, quien fue presidente municipal de Puebla y candidato a la gubernatura del mismo estado durante las pasadas elecciones. Y es que declaró que en 2019 adquirió, de contado, un departamento con valor de 4 millones 809 mil pesos a la inmobiliaria Tropical Livign, S.A. de C.V., firma que fundó Orvañanos Rea en Cancún.
En este año, el alcalde electo de Cuajimalpa dejó su cargo como director general del Instituto para el Desarrollo y Financiamiento del Estado en Quintana Roo (IDEFIN), para contender por la diputación local en Cancún, que finalmente perdió, y después en 2020 como vocero del gobierno estatal.
Además de ese favor comercial entre panistas, en 2020 María Cardona fue contratada -vía adjudicación directa- por la Secretaría de Administración y Finanzas de Yucatán, durante el gobierno del también blanquiazul Mauricio Vila.
El contrato fue para el diseño de proyectos, entre julio y diciembre de 2020, por un monto de 165 mil pesos. A pesar de que se reportó este gasto en ejercicios de rendición de cuentas, la administración de Yucatán impide conocer el contrato y los resultados de la ejecución de los trabajos.
Cardona Madero apareció en el padrón de proveedores y contratistas del gobierno de Yucatán, por lo que también pudieron efectuarse otros contratos no reportados de forma pública, debido a los contactos de Orvañanos Rea con funcionarios panistas.
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