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- Reitera su rechazo a estatuas y homenajes en su honor
- “No quiero ser líder moral, caudillo, ni cacique”
- Nadie podrá llevar la bandera del obradorismo
Juan R. Hernández
Ciudad de México. – Desde el inicio de su mandato, el Jefe del Ejecutivo Federal, Andrés Manuel López Obrador, ha dejado en claro su rechazo a todo tipo de iniciativas para poner su nombre en calles, escuelas, edificios y nuevamente, pidió detener la iniciativa de legisladores de Morena y sus aliados que proponía colocar en letras de oro en el Congreso de Oaxaca la frase “Por el bien de todos, primero los pobres”.
En su respuesta, el mandatario expresó su desagrado por cualquier tipo de homenaje que aluda a su persona. “Yo no quiero eso”, afirmó contundentemente al tiempo de sugerir que, en lugar de su frase, se inscriban palabras de personajes históricos de Oaxaca, como Benito Juárez o Ricardo Flores Magón.
“Ojalá no hagan ninguna referencia a mi persona. Mejor pongan una frase de Juárez, ‘Con el pueblo todo, sin el pueblo nada’, o de Flores Magón, ‘Sólo el pueblo puede salvar al pueblo’”, comentó.
Hace unos días, Sergio López Sánchez, presidente de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Oaxaca, informó que la mayoría de los diputados lo aprobaron.
Según López Sánchez, esta propuesta surgió en reconocimiento a los beneficios que ha recibido Oaxaca durante el mandato de AMLO, destacó el crecimiento económico y la creación de empleos en la entidad. A pesar de estos reconocimientos, el presidente ha sido enfático en que no desea ser inmortalizado en estatuas, ni que su nombre sea utilizado para nombrar calles o plazas.
En una gira por Oaxaca, López Obrador reiteró que al finalizar su mandato se retirará de la vida pública y no permitirá que se le use como símbolo del llamado “obradorismo”. “No quiero ser líder moral, caudillo, ni cacique”, subrayó.
Asimismo, recordó que sus hijos mayores, con quienes ha acordado que no ocuparán cargos públicos durante su mandato, son libres de participar en política tras su retiro, pero insistió en que no podrán representarlo bajo la bandera del obradorismo.
AMLO cerró con una anécdota sobre el rechazo a las estatuas, refiriéndose a ellas como “monos”, y reafirmó que no quiere monumentos ni homenajes en su honor; a finales de diciembre de 2021, se erigió, en Atlacomulco, una estatua en su honor creada por artesanos de Tlalpujahua, Michoacán, con un costo de 50 mil pesos que solo duró 3 días.
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