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Padres de familia exigen que las autoridades realicen las investigaciones correspondientes en la institución
DEYANIRA CARMONA
grupo cantón
CIUDAD DE MEXICO.- “Mi esposa y yo estamos exigiendo justicia, esperamos que las autoridades hagan su trabajo y detengan a la persona que le dio Clonazepam a mi bebé. Nosotros como padres dejamos a nuestros hijos en la guardería con la confianza de que los van a cuidar, como puede ser posible que pasen estas cosas. Queremos saber porque lo hicieron y si también lo han hecho con otros niños”, dijo Alberto Mendoza “N” indignado, padre del pequeño Ikal Balam “N”.
Hace unos días, Ángeles Torres “N”, tía del infante fue a recogerlo a la guardería con razón social Colegio Graham Greene, ubicado sobre la calle Manuela Sáenz, Coapa, en la colonia Presidentes Ejidales, alcaldía Coyoacán.
“Una de las maestras de la institución le entregó a mi hijo y le dijo a mi tía política que Balam estuvo muy inquieto y que tuvieron que dormirlo más temprano”, expresó Alberto “N”.
Inmediatamente, Ángeles “N” tomó al niño y luego de revisarlo físicamente corroboró que estaba bien, sin embargo, se le hizo muy extraño que “lo hubieran dormido” ya que su sobrino siempre tiene mucha energía.
Al sentir que algo andaba mal, la femenina al entregarle al niño de tan solo dos años de edad a su mamá Erika “N”, le contó que se le hicieron raras las palabras de la maestra.
MEDICO FAMILIAR
Al sentir que algo andaba mal la madre contactó al señor Alberto “N” y llamaron a su médico familiar quien como dictamen comentó que a Balam “N” posiblemente le habían suministrado algún químico para dormir.
“Cuando nos dijo eso, nosotros nos preocupamos mucho porque no sabíamos con certeza que era lo que le habían dado a mi hijo”, señaló el padre de familia.
Muy asustados, comenzaron a buscar un laboratorio para realizarle una prueba sanguínea.“El primer análisis se lo hicimos el 28 de junio, a las 11:00 de la noche, en la Clínica Diagnostica Vidalab ubicada sobre la callen Armada de México, en la colonia Residencial Cafetales, en donde arrojó que a mi hijo le dieron Clonazepam en suero. No conformes solo con ese diagnóstico le realizamos un segundo estudio al día siguiente en el Chopo localizado en Jardines de Coyoacán, los cuales también salieron positivos ante dicha sustancia”, expreso Alberto “N”.
Después de obtener los resultados Balam “N” fue llevado por sus padres al pediatra quien les dijo que el Clonazepam era una droga muy fuerte para un menor de edad y que era adictiva.
Además, les afirmó que el pequeño debe ser revisado constantemente a corto y a mediano plazo, ya que el medicamento le pudo haber desarrollado un daño psicomotriz o ansiedad.
“Nos comentó que si le hubieran dado más medicamento hubiera podido quedar en coma y hasta haber perdido la vida”, explicó muy triste el padre de familia.
AUTORIDADES
Al día siguiente, el 30 de junio, la señora Erika “N” en compañía de su esposo, asistieron al Bunker localizado en la Calle Gral. Gabriel Hernández, en la colonia Doctores, alcaldía Cuauhtémoc, en donde levantaron la denuncia.
“Ya con la denuncia hecha y con nuestra defensa fuimos al colegio de manera pacífica y le pedimos a la directora Edna López Araiza que por favor nos enseñara las cámaras de seguridad, pero ella se negó diciendo que el técnico no estaba y que era tardado obtener los videos. De hecho, cuando nosotros inscribimos a nuestro hijo en la escuela, no dijeron que habían dispositivos en todos lados y que podíamos tener acceso a ellas cuando quisiéramos, pero ya vimos que es mentira”, señaló Alberto “N”.
Además, los docentes y directivos, realizaron una junta con los padres de familia a la cual el señor Alberto “N” y su esposa, no fueron invitados.
“Dijeron que ellos ya habían revisado las cámaras y que no habían visto nada. Esas palabras nos indignaron mucho porque hasta el momento nos han negado la evidencia, nos han citado 2 veces para ver los videos, el miércoles 5 de julio y luego el 12, pero no hemos tenido éxito. No descansaremos hasta que mi hijo reciba justicia, además los otros niños también corren peligro.
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