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¿CÓMO APUÑALAR AL CINE?
SADIT GABRIEL
ESPECIAL. – Desde Transformers (2007) hasta Transformers: El Despertar De Las Bestias (2023), los live action de la franquicia han acostumbrado a las audiencias a ver, ocasión tras ocasión, filmes llenos de sinsentido y parquedad.
Ni el cine, ni los espectadores en general merecen algo medianamente similar, aunque posiblemente pueda errar. De Michael Bay, a Steven Caple Jr., 13 años han transcurrido y los espectadores aún no tienen una sola adaptación medianamente decente de la franquicia. Secuencias atiborradas de CGI (efectos especiales creados mediante pantalla verde), guiones inverosímiles, arcos argumentales inconclusos o personajes estúpidos, torpes y obtusos, suelen ser la forma más común para apuñalar al cine blockbuster al día de hoy; todos los elementos previos se repiten en la cinta como si el mañana, sencillamente, no fuera alternativa u opción. El error del proyecto yace en la construcción improvisada de un universo quimérico.
Tal como aquella mítica bestia griega, cada cinta está estructurada con partes, piezas y pastiches mal empleados que, de alguna forma, se la ingenian para crear atrocidades sin pies, cuerpo, alma o cabeza. Intenta volar, pero no va más allá de reducir sus horizontes para fracasar.
Nombre: Transformers: El Despertar De Las Bestias
Director: Steven Caple Jr. Año: 2023. Calificación: 3.5 (muy mala)
