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Ricardo Sevilla
El viernes, Enrique Graue se presentó ante la Comisión de Vigilancia de la Auditoría Superior de la Federación (ASF), en la Cámara de Diputados. El rector de la Máxima Casa de Estudios fue a entregar los Estados Financieros Dictaminados de la Cuenta Pública de la UNAM, correspondiente a 2022. Sin embargo, pocos sabían que Graue iba a San Lázaro ese día. Y es que no hubo comunicado oficial en la Cámara ni una publicación en la Gaceta UNAM.
Un grupo de diputados y diputadas nos aseguraron que la burocracia dorada de la UNAM escogió el día de su comparecencia. Se esforzaron en que Graue pasara desapercibido. Pero no lo consiguieron. Pese a los esfuerzos de Néstor Martínez Cristo, titular de la Dirección de Comunicación Social de la UNAM, Graue tuvo que enfrentar cuestionamientos muy duros sobre la pésima actuación que ha tenido al frente de la rectoría.
La diputada morenista Paola Tenorio, por ejemplo, reclamó a Graue sobre el paro que actualmente tiene paralizada a la DGAE y sobre el hostigamiento laboral y el acoso sexual que inunda a la Máxima Casa de Estudios (y si no lo cree, pregunten en la Facultad de Psicología y en los CCHs). El diputado Gerardo Fernández Noroña, por su parte, también cuestionó duramente a Graue sobre los señalamientos que pesan sobre él, referente a los casi 80 mdp que, de acuerdo con una investigación periodística de este columnista, el rector habría gastado a través de diferentes tarjetas bancarias.
Graue, con la cara enrojecida por la irritación, también tuvo que responder sobre el doctorado que presume, sin tener el grado correspondiente. Pero estaba tan nervioso que volvió a patinar y terminó confesando
que, la verdad, siempre se ha ostentado como doctor por “costumbre”. Aunque Graue tiene mucho qué responder, sigue sin hablar claramente sobre la corrupción que repta alrededor de la UNAM.
El presidente López Obrador decía que la UNAM estaba invadida por el pensamiento neoliberal. Y algunos dudaban. Pero no se equivocó. Al contrario: quizá no sabía que la Máxima Casa de Estudios está letalmente infectada por el virus de la derecha.
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