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Tras el catastrófico accidente de la Línea 3, Aylin Mixtli González se encuentra delicada en el hospital, mientras Yaretzi Hernández perdió la vida; la UNAM lo lamenta.
Redacción Grupo Cantón.
Después del lamentable incidente en la Línea 3 del Metro, familiares de las víctimas continúan tristes y preocupados por sus seres queridos, quienes, en algunos casos, su vida se encuentra pendiendo de un hilo, tras haber resultado lesionados en el catastrófico accidente. La mañana del pasado sábado 7 de enero, las redes sociales se inundaron de publicaciones de aquellos que quedaron atrapados en los vagones,” ¡Auxilio, necesitamos ayuda, el Metro acaba de chocar!”, ” ¡Estamos atrapados, hay mucho humo!”,”¡Por favor, necesitamos que nos saquen de aquí!” “¡Ya llevamos 20 minutos y nadie se asoma!”, decían despavoridos, con gritos de dolor y sollozos, pues minutos antes un tren impactó a otro entre las estaciones La Raza y Potrero.
Lamentablemente, el accidente dejó 59 heridos, la mayoría mujeres, ya que el impacto ocurrió en los primeros vagones reservados para las usuarias, y entre ellas se confirmó el deceso de Yaretzi Adriana Hernández Fragoso, de 25 años, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien perdió la vida al quedar prensada entre los tubos retorcidos, al ir sentada a un costado de la cabina.
Ante su deceso la UNAM publicó un comunicado donde lamenta la muerte de la joven, quien se encontraba estudiando la carrera de Artes Plásticas en dicha institución.
DRAMÁTICO TESTIMONIO
Afuera del hospital San Ángel Inn, el gobierno de la Ciudad de México, colocó centros de información para familiares de las víctimas. En ese sitio, Diario BASTA!, contactó a Israel González, hermano de una de las víctimas, quien narró los momentos de angustia e incertidumbre que vivió su madre, al enterarse que su hermana era una de las víctimas del choque de trenes.
Según testimonio del joven, aquella fatídica mañana, su consanguínea Aylin Mixtli González salió temprano de su domicilio ubicado en Azcapotzalco para realizar su servicio social en la colonia Del Valle, cerca del Metro Eugenia, ya que está por culminar la carrera en odontología en el Instituto Politécnico Nacional (IPN). Aylin Mixtli viajaba en el primer vagón del convoy que fue impactado por el otro.
El golpe fue tan brutal que la joven salió disparada de su asiento y en el vuelo su cabeza golpeó con uno de los pasamanos. En ese momento no sabía lo que estaba sucediendo y aturdida recogió su teléfono celular que estaba tirado sobre el piso y les avisó a sus familiares a través de un mensaje de texto de WhatsApp. “No sé qué pasó, parece que el Metro chocó, está saliendo mucho humo y hay mucha gente herida. ¡Por favor vengan pronto y pidan ayuda!, suplicó.
“Al saber lo sucedido, mi madre se preocupó mucho y salió corriendo a la calle para tomar un taxi y dirigirse al lugar. Para ese momento ya todo era un caos, pues mi mamá tardó más de 40 minutos en llegar, ya que solo se permitía la llegada al lugar de los servicios de emergencia.
Cuando arribó, ya habían sacado a mi hermana, sin embargo, como no estaba sangrando no le brindaron atención médica”, dijo Israel, hermano de la víctima. “¡Me siento muy mal, mamá, me pegué en la cabeza cuando se impactó el otro convoy”, expresó con lágrimas en los ojos Aylin Mixtli y añadió “¡Ya les dije a los paramédicos que me siento fatal y no me hacen caso!”.
Ante la respuesta de la joven, su madre se enfureció y exigió al personal de salud que atendiera a su hija, “¡Ya les dijo mi hija que se siente mal! ¿Por qué no la atienden? ¿Por qué no está sangrando? ¡Necesito que le brinden atención médica, qué tal si tiene alguna hemorragia interna!”, expresó la mujer ante la negligencia de las autoridades.
Pasaron minutos que pudieron haber sido fatales, pero afortunadamente, la joven fue llevada al hospital San Ángel Inn de Chapultepec, donde permanece bajo observación de varios neurólogos, ya que presenta dolores de cabeza extremadamente fuertes.
