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En 1988 el futbol mexicano vivió uno de los peores episodios de su historia con la suspensión de FIFA de años por el caso de los llamados “cachirules”
Carlos Horta Martínez
A través de la historia, el futbol mexicano, se ha visto envuelto en fuertes polémicas, que llevaron a la Selección Mexicana a no participar en dos Mundiales, y aunque en un principio se decía que el grito de “Eeeeeeeh puto”, podría dejarnos fuera de Qatar, cosa que no ocurrió, las anteriores ocasiones que sí lo hicieron, sí son considerados los mayores escándalos de los directivos mexicanos.
La única vez que el futbol mexicano ha sido castigado por la FIFA, de hecho, la peor sanción tuvo lugar hace 34 años, cuando una prometedora generación de futbolistas quedó fuera por dos años de toda competencia internacional, incluido el Mundiales juveniles, Juegos Olímpicos de Seúl 1988 (a los que ya se había calificado) y la Copa Mundial de Italia 1990, en donde no se pudo participar ni siquiera en la eliminatoria.
Después del histórico sexto lugar que como anfitriones se consiguió en la Copa Mundial de 1986, el futbol mexicano tenía ante sí un futuro prometedor. Con un Hugo Sánchez en plenitud y triunfando en el Real Madrid, y una interesante camada como Alfredo Tena, Manuel Negrete, Miguel España, Alberto García Aspe, Jorge Campos y Luis García, todo apuntaba a que el camino a recorrer durante el próximo ciclo mundialista estaría libre de problemas.
En un principio así fue, a finales de 1987 y en la primera parte de 1988, distintas representaciones de la Selección Mexicana obtuvieron su clasificación a los Juegos Olímpicos de Seúl 1988, y a la Copa Mundial Sub-20 que se realizaría en Arabia Saudita en 1989.
Sin embargo, todo cambió el 12 de abril de 1988, cuando en el diario deportivo Ovaciones el periodista Antonio Moreno reveló una irregularidad de la Selección Mexicana Sub-20.
Cuatro de los jugadores, estuvieron implicados en el escándalo de los “Cachirules” que sacudió a todo el país y al mundo del futbol: José de la Fuente, Gerardo Jiménez, José Luis Mata y Aurelio Rivera. Las actas de los primeros dos estaba alterada por dos años; la de Mata estaba cambiada por cuatro años; y la de Aurelio Rivera por cinco.
La noticia fue también difundida por Imevisión, por conducto de los periodistas José Ramón Fernández y Javier Solórzano, que llegó a oídos de Guatemala, el rival afectado del Torneo Juvenil de Concacaf, clasificatorio al Mundial Sub 20 Arabia Saudita 1989.
La Concacaf fue la primera en sancionar a la Femexfut con dos años fuera de competencias juveniles del área a la Sub 20, y marginar a la Selección Mexicana del Mundial de Italia 90.
Asimismo, Concacaf inhabilitó de por vida a los siguientes funcionarios que ejercían alguna labor en la Federación: Rafael del Castillo (presidente del consejo), Rafael Lebrija Saavedra (presidente de la Primera División y vicepresidente del consejo), José de Jesús Álvarez Guzmán (presidente de la Segunda División), Rafael Castellanos (vocal), Víctor Manuel González Dávila (secretario general de la federación), Ramón Martínez (secretario), Manuel Aceves Montenegro (tesorero y compilador del anuario original), Gerardo Gallegos Cásares (presidente de la Tercera División y subdirector de la selección juvenil), Gilberto Morfín Salazar (presidente de la rama amateur de la FMF), Francisco Javier Cantú (prosecretario) y Héctor Antonio Pérez Contreras (segundo vicepresidente y jefe de la delegación mexicana al torneo celebrado en abril).
IMPLICADOS
Las actas de nacimiento de Aurelio Coreano Rivera, José Luis Mata, José de La Fuente y Gerardo Jiménez fueron alteradas, por lo que son conocidos como los cachirules
