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“Candado verbal ha frenado venta de la institución bancaria”, aseguró a Diario abastá el especialista Atzayaelh Torres
Redacción Grupo Cantón
Luego de que este lunes Grupo Financiero Banorte informara que no continuaba en el proceso de compra de Banamex, Marcos Ramírez, director general del banco, dijo que la intención de compra buscaba maximizar el valor del banco para sus accionistas.
Para el especialista Atzayaelh Torres, editor de Economía de El Financiero, una causa por la que no se logra la venta de esta división de Banamex es la existencia de un ‘candado verbal’. “Ya se habría cerrado la operación desde hace tiempo, sin embargo, hay un candado no escrito, un candado verbal que le puso el Presidente Andrés Manuel López Obrador, que debería ser comprado por un grupo financiero mexicano.
Al haber hecho esta petición por parte del Presidente, el universo de grupos financieros que tiene los activos suficientes para comprar este tipo de negocios de este tamaño, esta división de negocios que está vendiendo Citibanamex, es muy grande”, expuso.
“No es bien visto en el argot financiero que se retiren tantos compradores, empero, el hecho que siga habiendo gente interesada es positivo”, dijo, por lo que recomendó que en el caso de Citibanamex debe haber condiciones claras de venta y una flexibilidad por parte del gobierno de no sujetar tanto esta venta de uno de los bancos más grandes del país.
Para el analista Víctor Sánchez Baños, desde su perspectiva Banorte, que preside Carlos Hank González, anunció que no seguirá en el proceso de compra de Banamex organizado por Citigroup, el motivo es –relativamente- simple: “Tiene que competir con el magnate y empresario respetado por la 4T, Carlos Slim Helú, donde no hay cartera que alcance, ante el interés que pueda tener por la cartera minorista de Banamex, que fue el feudo de su primo Alfredo Harp y su socio Roberto Hernández. La otra es que el pastel del banco, que está en manos de Citigroup, no lleva a los clientes mayoristas, que es el bife. Buena decisión, al final”, enfatizó.
Para especialistas en el sector financiero, la operación resultaba compleja para Banorte debido a que la eventual operación implicaría desprenderse de su negocio de Afore Siglo XXI, debido a que Banamex se vende con su propio negocio de Afore.
Además, señalaron que alrededor de tres cuartas partes de la plantilla laboral tendría funciones duplicadas, una situación complicada debido a que una de las condiciones del gobierno es que no haya despidos.
En la actualidad son dos los empresarios mexicanos que estarían interesados en la compra del banco: Germán Larrea Mota Velasco, la segunda persona más rica de México, y Daniel Becker.
