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Alumnos y docentes de varios planteles de la Universidad Nacional Autónoma de México, son los más señalados en denuncias durante la gestión de Enrique Graue
Omar Montalvo
Ciudad de México.- La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) a cargo del rector Enrique Graue Wiechers más allá de ser la máxima casa de estudios se ha convertido en una institución que acumula miles de casos por violencia de género en la comunidad universitaria, dónde la Defensoría de los Derechos Universitarios Igualdad y Atención de la Violencia de Género (DDUIAVG) indica que de 2019 a 2021 se contabilizaron hasta 2 mil 30 incidentes de algún tipo de violencia.
En respuesta a una solicitud de información la DDUIAVG desglosó que la UNAM tiene conocimiento de hasta 750 incidentes por violencia sexual dentro de sus instalaciones, además de ser el tipo de violencia más cometido. La universidad considera casos de violencia sexual cuando hay acoso u hostigamiento sexual, tocamientos, violación con o sin consumo de sustancias psicoactivas, contactos sexuales no deseados y prácticas sexuales no consensuadas.
A la violencia sexual le siguen los casos de violencia psicológica reflejada en 565 casos y violencia por discriminación en 250 incidentes, los cuáles son por exclusión a causa del género, identidad de género, sexo y orientación sexual.
Pese a que la UNAM se regocija en su prestigio nacional y regional, la DDUIAVG indicó que del 2019 al 2021 hubo al menos mil 24 quejas por violencia de género, dónde los señalados son 495 alumnos, 281 académicos, 110 trabajadores de base, 56 de confianza y 9 por honorarios. Aunque las cifras de personas que abusan de su cargo son altas, en la solicitud de información la DDUIAVG no indicó la existencia de alguna sanción a los estudiantes y personal universitario. Los señalados en las quejas fueron 940 hombres, 58 mujeres y 26 no identificados.
Los casos de violencia de género ocurren en todos los planteles de la UNAM, pero la población que ha registrado más incidentes es la perteneciente al nivel facultad, ya que entre las escuelas de Ciudad Universitaria y las FES hay 628 casos que fueron denunciados, 177 a nivel bachillerato, 72 en coordinaciones y dependencias, 51 en institutos y centros, 44 en planteles nacionales y 6 en posgrado.
Por la pandemia de Covid-19, la UNAM estuvo en actividades en línea del 17 de marzo de 2020 al mes de septiembre de 2021 que inició el modelo híbrido con aforos reducidos en los planteles, sin embargo, los casos reportados por violencia de género, no pararon.
En el 2019 la Unidad para la Atención de Denuncias (UNAD ahora DDUIAVG) indicó que hubo 539 quejas por violencia de género; en el 2020 que fue el año más crudo de la pandemia, hubo 319; y en 2021 con el primer semestre en línea y el segundo de forma híbrida, se contaron hasta 317 denuncias.
Los casos de violencia de género siguen ocurriendo en los planteles de la UNAM sin que existan sanciones a los agresores sexuales, como ocurrió a finales de agosto pasado en el Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH) Sur, cuando las colectivas feministas denunciaron que el departamento jurídico del plantel le pidió a una alumna que no hiciera público su caso donde fue víctima de un intento de violación en uno de los edificios. En abril de 2022 también hubo una violación en el CCH Sur sin que las autoridades tomaran las acciones correspondientes.
La semana pasada una estudiante del plantel Sur denunció que fue víctima de una violación sexual en uno de los baños del CCH, lo que detonó una serie de protestas de la comunidad estudiantil contra las autoridades de la UNAM. Entre la rabia por la impunidad, el viernes pasado los estudiantes prendieron fuego al mobiliario del CCH Sur y al 25 de octubre, las colectivas feministas realizaron una marcha del plantel al edificio de Rectoría.
A pesar de que el rector Enrique Graue “condenó enérgicamente” el último caso de violación en CCH Sur, sus administrativos tardaron hasta la tarde del lunes para recibir el pliego petitorio de la comunidad estudiantil quiénes amagaron con tomar las instalaciones universitarias si observan que la UNAM no cumple con sus peticiones.
