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A un lustro del temblor que cambió a México, existen miles de familias que aún no han podido regresar a sus hogares y que viven con miedo e inseguridad
Alier Blancas
A cinco años del sismo del 19 de septiembre de 2017, en el que murieron 369 personas y quedaron decenas de edificios en ruinas, mayormente en la Ciudad de México, las memorias de aquel día resurgen con angustia, miedo y melancolía.
“Yo sólo deseo que no se vuelva a repetir lo de hace unos años, la ciudad fue un caos y se lloraba desesperación por todas partes, era un ambiente de tristeza y a la vez un estado emocional que le decía a tu cuerpo ‘tenemos que ayudar’”, comentó Georgina, habitante de la colonia Obrera.
Tan solo en la CDMX, las víctimas mortales fueron 228. Es justo la capital del país la que resultó con la mayor cantidad de edificios dañados. Cinco años después de esa tragedia, algunos de esos inmuebles permanecen en el abandono. De los edificios que se desplomaron por el sismo, los que más se recuerdan por la cantidad de fallecidos son el de Álvaro Obregón 286, en la colonia Roma Norte, el que estaba en la esquina de Ámsterdam y Laredo, en la Hipódromo Condesa, Puebla y San Luis Potosí, el taller de costura de la Colonia Obrera o los Multifamiliares de Tlalpan.
Además, se dijo, a cinco años del temblor, el tema del Cartel Inmobiliario muchas de las demarcaciones, es más que una realidad, donde hay impunidad y nunca hay culpables; “Sabemos que vivimos en una zona sísmica, pero después de tantos años no ha habido ningún detenido por el derrumbe de edificios, es necesario que haya responsables”, mencionaron.
