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“Es lo mejor para consolidar nuestro proyecto político y es lo que ya tenemos acordado política y legalmente en nuestro estatuto”, señaló Sebastián Ramírez, nuevo líder morenista en CDMX
Enrique Sánchez Márquez
Obradorista de cepa auténtica, joven, entrampado entre dos mundos: el de los retos de su juventud y sus anhelos de sumarse con resultados concretos a la Cuarta Transformación, Sebastián Ramírez enfrenta el gran reto de borrar del camino a la oposición en la
Ciudad de México y preparar el triunfo de Morena en la sucesión de 2024.
“Hay un tramo largo que recorrer, en esta ciudad al que define con todo su convencimiento que se trata del mayor batión histórico obradorista. La Ciudad de México. Y no vamos a permitir que otros lo arrebaten”: para él hay un camino y lo promueve: Morena tiene pleno convencimiento de que las encuestas serán el mejor camino para vislumbrar el proyecto político.
Y lo replica: “Es el mejor y además es el que ya tenemos acordado política y legalmente en nuestro estatuto, así es que ni modo de ahora echarnos atrás. E insiste. Es el que además nos ha funcionado muy bien. Fíjense ahora en el Estado de México nos funcionó bien y ahí están los gobernadores triunfantes. En Morena son 22. Todos elegidos por encuesta, entonces, cuando la gente te dice es
por ahí, ahí hay algo que poner atención, ¿no?”.
Suelto, cordial, sin redondeos y con un lenguaje directo, explica a Basta! durante la entrevista que concedió durante su visita a esta redacción que ya sabemos que si nosotros le preguntamos a la gente, no nos vamos a equivocar. Y ejemplifica que Morena tiene que ser como una gran locomotora, un gran tren que vaya hacia delante e invite al pueblo a organizarse. Y eso es lo que vamos a hacer hasta unas horas antes de la votación en junio de 2024.
Y se pone de ejemplo. Yo era alguien que no se dedicaba a la política, yo no tengo papás políticos, tíos políticos, no, mi familia es como muchas otras que sigue una vida normal, pero hubo una brigadista de Morena que fue casa por casa, que fue a mi domicilio y me dijo, ‘oye, venimos de parte del licenciado López Obrador a invitarte a participar, apúntate’. Y dije, órale va, me meto y aquí estoy.
Aquí aprovecha un espacio para anunciar que a Morena la van a ver recorriendo casa por casa para informarles y a invitarles a participar, a organizarse. Esto, sin duda, dice, es un gran paso organizativo. Nadie la tiene en la Ciudad de México.
Y luego lo que parece una broma la transforma en una idea de mucho fondo: Vean como gente de otros partidos, unos 30 se reúnen y
llenan un café para deliberar sobre el país del futuro.
Irónico, abierto, con alguna dosis de sarcasmo comenta que para ellos eso es un partido, y en eso, nosotros en Morena, tenemos una ventaja que la vamos a aprovechar lanzando una campaña muy importante informativa de rendición de cuentas. A su juicio, explica, los partidos tienen la obligación de rendirle cuentas a la gente porque primero pedimos su voto, ¿pero y luego qué?, ¿cuándo rindes cuentas? Entonces Morena y todos sus gobernantes van a dar cuentas.
Esto reviste una gran importancia, porque no hay que olvidar que en este proceso, como nunca el 40% lo componen jóvenes.
RESPETO Y TRATO INSTITUCIONAL
Con Marcelo Ebrard ofrece un trato institucional, de respeto total. El presidente de Morena tiene que ser institucional y nosotros vamos a trabajar para que siga la transformación en la ciudad para dar el siguiente paso. Lo otro es politiquería, grilla y en eso no estamos.
Al preguntarle sobre Monreal, respondió: “A mí lo que me toca es lograr que en la ciudad demos el siguiente paso de la transformación. Nuestro adversario es el conservadurismo. Entonces, yo no me voy a andar metiendo en temas de confrontación
con los compañeros y compañeras de Morena, sea quien sea”.
Y sobre la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, dijo: “La jefa de gobierno es una persona, es una dirigente política a quien yo respeto mucho, a quien le tengo mucho afecto y a quien le he aprendido mucho. Es una mujer muy trabajadora, muy honesta. ¿Y cuál es mi rol? Yo soy el presidente del partido en la CDMX por unanimidad de los consejeros que tuvieron esa deferencia conmigo. Construimos un consenso. Como representante de Morena en la ciudad me toca respaldar al gobierno de Morena en la CDMX”, finalizó.