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Javier Lagunas.
En su conferencia matutina, al responder sobre distintos temas, el presidente fue aún más claro o directo respecto a su postura frente a los grandes medios de comunicación y sus columnistas estrella: “imagínense si yo estoy pendiente de lo que diga López Dóriga, o Sarmiento, o Loret de Mola, o Aguilar Camín, o Leo Zuckerman” ¿Cuál fue la intención de sus palabras?, sencillo, ponerlos en su
lugar. El mensaje es, yo estoy aquí para gobernar en pro de todos, especialmente de los sectores más vulnerables, no para élites mediáticas, económicas ni políticas. Por más que despotriquen NO LES VOY A HACER CASO, lo de ustedes es coraje solamente, no es análisis serio ni crítica constructiva.
Les está aconsejando además: se desgastan en vano; al atacarme pierden y yo gano, pero ¡no lo han entendido!
Mejor ábranse, declárense en contra mía y no simulen objetividad, ganarán más así y hasta se agradecería la sinceridad, está bien ser contrario u oposición pero reconózcanlo, tengan ese valor civil, la hipocresía los tiene extraviados y ridiculizados, –es y ha sido su mensaje – AMLO les dice que él no puede ni debe distraerse en las pen…tonterías o necedades que, en su respetable libertad de expresión, exponen los aludidos “expertos”, no me alcanzaría el tiempo, yo debo gobernar, tomar acción, si me dedicó a hacerles caso, no haría nada; mi tiempo es para la población en general, NO para un grupúsculo de intereses creados que aún no asimilan el fin de sus privilegios y por más que manden a sus huestes de la gran prensa para atacar mis proyectos, NO LOS VEO NI LOS OIGO, como diría el clásico.
