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Jesús Gallegos
Veinte años después reaparece Guillermo Peregrín, sobrino de Rodrigo, papá de Belinda, para anunciar que viene por venganza. Entre los afectados por este supuesto delito, está su padre Fernando Peregrín, quien, junto con su mamá, “pagaron justos por pecadores”, viviendo carencias para saldar la deuda que su familiar les dejó en España.
¿Por qué hasta ahora emprenderá un juicio contra el papá de Belinda, si han pasado más de veinte años del supuesto desfalco? Muy simple la respuesta: Guillermo era un niño. Guillermo Peregrín, quien demanda justicia, publicó en su cuenta de su Twitter que vendrá desde España para arreglar este asunto y como tiene pruebas, no se tocará el corazón en demandar al padre de la española.
Belinda, por su parte, vive el “quebranto” de su relación con Christian Nodal, pero consuela su tristeza acariciando el anillo de diamantes valuado en millones de dólares. Christian Nodal, por otra parte, acaba de recibir una lección de Caz, del Grupo Firme, que le aplicó la “ley del hielo” cuando se encontraron en los Premios Lo Nuestro porque cuando Firme no era ni un granito de arena, lo invitó a cantar con su conjunto naciente y el ya famoso Nodal, lo mandó por un tubo.
Bien decía Don Emilio Azcárraga Milmo: “La vida es la rueda de la fortuna. Cuando estás arriba pateas a los de abajo y cuando tú estás abajo, pagas tu soberbia con la misma moneda”.
