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LA NOVENA SUREÑA SE COBRA LA AFRENTA Y SE LLEVA LA SERIE, EN LA GUERRA DE GUERRAS ANTE EL MÉXICO, EN EL ESTADIO ALFREDO HARP HELÚ
FERMÍN SÁNCHEZ
GRUPO CANTÓN
CIUDAD DE MÉXICO.– Con alegría y una gran entrada, se llevó a cabo en el Estadio Alfredo Harp Helú la emoción de una versión más de la Guerra de Guerras, entre los Tigres de Quintana Roo y los Diablos Rojos del México, la cual fue dramática hasta el último segundo; para mala fortuna, los chamucos no pudieron que- darse con la victoria en su casa; la pizarra final fue 9-8, los visitantes se llevaron la Serie 2-1.
Felipe Arredondo obtuvo la victoria con trabajo de dos episodios, con cuatro ponches; Edwin Fierro cargó con el descalabro, se mantuvo en la loma 0.2 innings, y toleró tres carreras, producto de tres imparables.
Todo comenzaba bien para Los Pingos, pues tomaron ventaja tempranera con anotación de Carlos Figueroa, quien se embasó con doblete, llegó a tercera con rodado dentro del cuadro de Hernández, y finalmente pisó el plato con lanzamiento descontrolado del abridor felino.
Los locales estaban con todo, y ampliaron su delantera con dos producciones de Ricardo Valenzuela, y con sencillo una más de Omar Meza para poner los cartones 3-0.
Tigres se acercó en el cuarto tramo con sencillo productor de Reynaldo Rodríguez y doblete de Marcos Vechionacci, que movieron los cartones 3-2, aún con ventaja escarlata.
La parte baja del cuarto capítulo trajo rally de cuatro para la Marabunta Escarlata, con producciones de Vielma, Ávila, y dos más con doblete remolcador de dos que salió del madero de Omar Meza, que movieron la pizarra 7-2.
En la quinta, Adrián Leo relevó al abridor Torres (IP 4.0 CLA 2), y Alejandro Torres acercó a la visita con Grand Slam que puso a los bengalíes a una carrera.
La fatídica séptima entrada, trajo rally de tres para Tigres, y con producciones de Rodríguez, Vechionacci y Domínguez, la visita le dio la vuelta a la pizarra 9-7.
Tras la llegada de la lluvia, el invitado incomodo por 44 minutos, el México se acercó en la octava con elevado de sacrificio de Daniel Jiménez, que permitió al corredor emergente, Jorge Cantú, llegar al plato con la octava rayita roja.
Juan Ramón Noriega cerró la puerta con su primer salvamento de la temporada, Tigres se llevó el juego 9-8 y aseguró la Serie.
