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El ex futbolista y hoy analista deportivo, platica con Grupo Cantón acerca de esta pieza que transmite Azteca Deportes; “no cambiaría nada de lo que he vivido hasta ahora”, asegura
Rodrigo Mojica
Grupo Cantón
CIUDAD DE MÉXICO.- Familia, futbol, medios de comunicación. Hijo, padre, esposo, amigo. Goles, habilidad, orgullo, ejemplo, internacional, chistera. Innovación, irreverencia, análisis, improvisación.
Mis Tres Vidas, Luis García. Son varios roles, títulos, etiquetas, facetas, todo inmerso en una sola persona, que, a partir de hoy, podrá plasmar un camino único en la inmortalidad de la pantalla.
De la casa al barrio, de ahí, a los llanos, a la profesionalización, a los vítores, a la graduación de convertirse en jefe, pero en otro ámbito, en el de la consanguinidad.
El Doctor, como le dicen todos, un tipo que resultó creativo en esto de contar y platicar de futbol, igual como buen personaje inmiscuido en las nuevas tecnologías, y tal vez apegado al último grito de la moda, decidió, diríamos igual en un lenguaje más pro, subirse al tren del mame.
Y es que su popularidad, arrastre, pero sobre todo simpatía, que alcanzó para cautivar a un nicho inexplorable, fue el pretexto perfecto para que, en su otra casa, Azteca Deportes, entendieran que era momento de aventarse en este mundo de contar historias, aunque con ese toque más sabrosón que resulta cuando de pronto se pueden recorrer lugares recónditos, a partir de los que conocen las entrañas de cada quien.
Y esta noche, a las 19:00 horas, por las diferentes plataformas de la televisora del Ajusco, se transmite el capítulo 1 de Mis Tres Vidas, documental que desmenuza un poco la vida del llamado Niño Artillero, desde una mezcla tripartita para entender un poco más acerca de su existencia.
El balompié lo dio a conocer jugando con Pumas, y luego saltando el charco para enrolarse en el Atlético de Madrid y la Real Sociedad.
Y fue luego de colgar los botines, que, tras una etapa como directivo del Morelia, se aventuró detrás de la caja de transistores, desde la cual pudo ser parte de una manera poco común de transmitir pambol.
Pero también está esa otra vertiente, la más íntima, y que tiene que ver con los suyos, a los que ahora disfruta como nunca.
Luis, aún no tan convencido de ser el protagonista de su propia pieza, porque además no podía ser distinto, en una tertulia fresca, entre informal y dicharachera, desmigaja en charla con Grupo Cantón una pizca de lo que han sido sus distintas etapas, todas llenaderas, porque además se sincera, no modificaría siquiera un ápice de lo vivido.
“No le cambiaría nada, ni un punto, ni una coma, ni puntos suspensivos, ningún punto y aparte, porque la posibilidad de que hoy pueda platicar de esto, es porque la vida me puso en este camino, y mucha gente transitó junto a mí, muy buenas personas, malas, y de todas aprendí, y con todas estoy sumamente agradecido”.
EL FUTBOLISTA
Su salto al foco mediático, y el balompié como punta de lanza, es la raíz de todo, desde sus inicios en el equipo de la colonia, hasta su primera vez como elemento de Pumas, el equipo de sus amores.
“Me hicieron una larga entrevista, platico mucho de Ciudad Satélite, que tiene mucho que ver con el club al que iba, el Berimbau, ahí jugué de forma amateur para después dar el brinco a Ciudad Universitaria.
“En el primer capítulo digo que ‘ha sido una vida de poca madre’, porque así lo creo, y estoy cierto, y ha sido una vida sin pausa, muy intensa por el deporte, la competencia, que te obliga a tener un temperamento, y esa fue la misma elección que me dio el futbol, siempre intentar ganar”.
COMENTARISTA
Junto a Christian Martinoli y Jorge Campos creó un concepto, una nueva tendencia en los medios de comunicación, en el segmento de deportes, su nicho actual.
“Fue muy circunstancial, sí, decidimos montar un estilo, la transición llevó mucho tiempo, un camino largo, hubo detractores internos y externos, que nos les gustaba que se cambiara la comunicación deportiva, presidentes de clubes que le hablaban al jefe: ‘No quiero que Martinoli y que García narren y comenten el partido, porque mi equipo pierde’, puntualmente era gente de Cruz Azul y Santos.
“Ese estilo tardó en fraguarse, pero tiene que ver con un tema, primero, de piedra angular, pues José Ramón (Fernández) se va, no podíamos seguir con ese modelo de éxito, y decidimos relajarnos, echar desmadre, el editor general del Canal nos pidió divertirnos, era desafiar un modelo bravísimo, y se fue encaminando, logramos ese clic de llegar a una audiencia a la que no llegábamos, como a mujeres y jóvenes”.
HIJO, ESPOSO, PADRE…
El tema más personal, y que tiene que ver con el hogar, con el terruño, igual se aborda en la serie, una parte que el Doctor revela, pudo ir recuperando.
“Como futbolista me pasó mucho, y Lorenza, mi hija, habla en un capítulo de ello, perdí mucho tiempo con mi hija mayor, pero hoy estamos recuperando momentos padrísimos, construyendo caminos maravillosos; el futbol y el divorcio con su mamá me impidió estar con ella en ciertas edades que son muy importantes.
“Hoy, aunque también es cierto que de pronto debo viajar, entre semana tengo el tiempo de poder estar con mis chavos, jugar más con ellos, intentar estar más con mis hijos. También el tema personal de pronto te pierde, porque te crees más de lo que deberías, sales en la tele, estas pendejadas y humo que de pronto se nos meten en la cabeza, pero siempre la familia te trae al origen”.
Identidad
Luis habla acerca de la identidad en el futbol, luego de haber pasado en México por equipos como Pumas, América, Chivas, Puebla, Atlante, entre otros; en España, por el Atlético de Madrid y la Real Sociedad.
“La forma en que yo pude exponer que les tenía un grandísimo respeto por lo que son, fue jugando a mi máximo nivel, siendo la mejor versión de mí mismo ante estos exequipos, es mi manera de decirles que les tengo un grandísimo respeto.
“A mí me identifican un poco más con Pumas, pero yo fui inmensamente respetuoso con todas las playeras que jugué, en algunas hice bien las cosas, en otras mal, en otras bien y mal, pero siempre respetuoso”.
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