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Diego Cedillo
Hace 59 años, ocurría una de las escenas más emblemáticas, con la modelo, Norma Jeane Baker, mejor conocida como Marilyn Monroe, al cantarle “Happy Birthday Mr. President” a John F. Kennedy, trigésimo quinto presidente de EU.
Seguramente dicha escena, hoy resultaría más que envidiada por algunos candidatos mexicanos. Como David Monreal, pues a raíz de aquel video donde salía violentando a su compañera de partido, es claro que
el hermanito del Senador Ricardo Monreal, dejó bastante cola para que le pisen.
Ya que aseguran los confidentes de este “tecleador”, que a tal grado llega la hecatombe con las y los candidatos en Zacatecas, que más de un ciudadano ha afirmado: “que se vayan los pen…itentes y regresen los corruptos”, debido a la incompetencia que precede a Monreal Ávila, cuando estuviese al mando de la Coordinación General de Ganadería, dejando irregularidades administrativas por 271 millones, generando que el programa “Crédito Ganadero a la Palabra” se cancelara. Ahora sí que como diría el amigo del Presidente Andrés Manuel López Obrador, el Mtro. Enrique González Pedrero, “hablarán los hechos”.
POST IT
Valdría la pena recapitular, que no todas las historias tienen finales felices, como la ocurrida con JFK y Marilyn Monroe, o también la acontecida
allá por 1822, cuando -hoy- el Congreso mexicano ratificaba a Agustín de Iturbide como emperador. Seguramente todas y todos mis queridos lectores, sabrán como acabó tal coronación, algo parecido con la presidencia de Don Vicentillo Fox, desastre que lo persigue hasta hoy en día.
Pues, a pesar de haber recibido su Doctorado Honoris Causa por la Universidad de Miami, por parte de su ex-secretario de Salud, Julio Frenk (rector de dicha casa de estudios).
Solo fue cuestión de tiempo para que el ex- promotor de su campaña presidencial, Lino Korrodi, se mofara afirmando que dicho título debió haberlo obtenido por “transa y corrupto”. Detallando que su casa en San Cristóbal es un monumento a la corrupción; subrayando que
Fox Quesada, ni siquiera acabó su carrera en la Universidad Iberoamericana. ¡auch!
