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Ante la inacción y la falta de interés por controlar la inseguridad en el primer cuadro de la capital por parte de la alcaldía Cuauhtémoc, los comerciantes de esa parte han tenido que contratar un grupo de seguridad para que los proteja a ellos y a toda su familia, pues también está amenazada de muerte.
A decir de los vendedores del Centro Histórico, el grupo delincuencial La Unión de Tepito no es la única organización delictiva que se dedica al secuestro, robo, asesinatos, narcomenudeo y extorsión a los ambulantes de ‘Tepito’, así como del Centro Histórico. Además, está ‘La Fuerza Anti Unión’ y ‘Los Paraguayos’ quienes les disputan el territorio, pero quienes pagan dicha disputa entre cárteles son los pequeños y medianos empresarios, sobre todo los ambulantes.
“Eso no es lo grave, debido a que este grupo de delincuentes calificados como sanguinarios por parte de los afectados hoy reclutan a nuestros hijos, pues ya tienen el control de la zona, sin que las autoridades del Gobierno como de la alcaldía hagan algo”, narró un testimonio.
Explicó que esto lo realizan con el fin de convertirlos en “halcones”, “asesinos” o bien “sicarios”, a cambio les ofrecen motonetas, droga y dinero “para que vivan con todas las comodidades mundanas”, así lo manifestaron madres y padres de estos jóvenes que los han enrolado en la mafia.
El miedo en las calles de la zona oriente del Centro Histórico se percibe, pero no sólo por ‘aguantar’ a los integrantes de las bandas ya señaladas, sino por el nuevo ejército que preparan para delinquir.
“Eso preocupa, y no tenemos duda que por la forma en que hacen sus ilícitos estos sanguinarios delincuentes están protegidos por las altas esferas del poder, sino fuera así quien más les puede dar impunidad”, denunciaron familiares de los hijos que ya están en la línea de fuego.
Para los vendedores, ‘los padrinos’ son los jefes policiacos de la Procuraduría capitalina, además de varios jefes de sector de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, además de personal de la alcaldía Cuauhtémoc.
Los comerciantes afirmaron a Diario BASTA que las calles del Centro Histórico se están volviendo un polvorín que puede estallar en cualquier momento, sobre todo porque los delincuentes y sus padrinos han estirado mucho la liga hasta romperla por lo que hasta vendedores establecidos y dirigentes de ambulantes se están armando, e incluso muchos de ellos traen ya escoltas.
La ciudad de México, aseguran los denunciantes “en breve se va teñir de rojo si las autoridades capitalinas no hacen nada por detener a sus “ahijados”.
