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México.- El Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal de la Ciudad de México reconoció como “víctima de desaparición forzada” al joven Marco Antonio Sánchez, estudiante de la Prepa 8 de la UNAM, que en enero del 2018 fue detenido y golpeado por policías capitalinos y luego apareció extraviado en el Estado de México con daños severos de salud. Con ello, la familia del menor podrá acceder a la reparación integral e indemnización por la violación de sus derechos.
En este contexto se advierte que conoció de estos hechos los que se consideran razonables para sospechar que el adolescente Marco Antonio había sido sometido a desaparición forzada como delito –pues los datos que le proporcionaron indicaban que se desconocía el paradero del adolescente”, dice la sentencia del amparo en revisión 53/2019.
Poder Judicial concede amparo a Marco Antonio: Confirma que sí fue víctima de #desapariciónforzada por autoridades de la #CDMX y #EDOMEX #Comunicado https://t.co/AMlTG87RlY@ppinocenciamx #ODI pic.twitter.com/P5Yu5tjkOi
— Derechos Infancia (@derechoinfancia) May 21, 2019
La sentencia recalcó la responsabilidad de las autoridades capitalinas, quienes se negaron a activar el protocolo para investigar una desaparición forzada. La última vez que se vio al joven antes de que se extraviara estaba siendo golpeado por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP-CDMC).
Añadió la sentencia: “después de su detención por policías de seguridad pública de esta localidad y según informes lo habían liberado, pero no se tenía conocimiento del lugar en donde ocurrió tal hecho y menos las condiciones en que se efectuó, lo que debió advertir que era irregular por no apegarse a la normatividad”.
La decisión fue celebrada por la Red por los Derechos de la Infancia (Redim), quien mediante un comunicado de prensa, recordó que en el gobierno de Miguel Ángel Mancera “autoridades capitalinas decidieron políticamente que no existió la detención arbitraria, tratando de minimizar el hecho arguyendo que se trataba de otro ‘adolescente problemático’”.
“Por tales actos de autoridad Marco Antonio y su familia fueron revictimizados mediáticamente, aparte de que se les ha privado de manera reiterada de sus derechos a la justicia y a la verdad, negándoseles siquiera una investigación seria y efectiva”, añadió la Redim.
“El que se lograra la reaparición de Marco Antonio cinco días después por la intensa movilización social, no significó desaparecer el hecho delictivo de la desaparición forzada y, en consecuencia, la investigación y persecución de los presuntos responsables”, añadió.
El 23 de enero del 2018, en los alrededores de la estación El Rosario del Metrobús, Marco Antonio fue detenido por policías capitalinos, quienes lo inmovilizaron y golpearon, pero no lo presentaron ante el ministerio público.
Según la versión de los uniformados, lo detuvieron por una supuesta denuncia ciudadana de robo de celular y lo subieron a la patrulla. Minutos después lo dejaron libre.
Marco Antonio reapareció cinco días después en Tlalnepantla, Estado de México, con severos daños de salud y trastornos psicológicos, derivados de un golpe en la cabeza que sufrió cuando los agentes lo intentaron detener.